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UN POCO DE PASTA BASTA

El ídolo del Glam (Dedicado a Güito 1969-2009)

Era frecuente que Star Lux renunciase a versionar los "jingles" de ciertas marcas comerciales que también se resistía a comprar en el supermercado.

Hechosdehoy / Enrique Mochales
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El ídolo del Glam-rock de los ochenta, Star Lux (Star para los amigos) famoso por sus botas de plataforma que él mismo diseñaba y fabricaba con tacos de corcho, betún y brillantina escolar en tubos, llegó al éxito pasajero en una plaza de la margen izquierda del Nervión junto a su grupo, los Butterfly Pillows, con temas como Scoch Britte, Yo no puedo estar sin él, Norit cuida lo que lavas, Siempre hay un motivo para usar Nivea, y su himno Con unos años más, como Barbie seré (y mientras jugaré con mi Barbie Superstar).

Conociendo su temperamento imprevisible, era frecuente que Star Lux renunciase a versionar los jingles de ciertas marcas comerciales que también se resistía a comprar en el supermercado, a pesar de que en otros casos, como el de su conocida balada Qué buenas son, las galletas Fontaneda, no tuviese ningún reparo en comerse el objeto de su inspiración para desayunar con mantequilla y mermelada.

Tras cosechar un nuevo éxito con el tema Un poco de pasta basta, Gior, en un claro homenaje a Burt Bacharach, los Butterfly Pillows decidieron darse a conocer más allá de los Altos Hornos de Bilbao autofinanciándose una maqueta que llamaron Anunciado en TV.

La cinta de magnetofón corrió de mano en mano, fue difundida por radios piratas, sobrevivió en la guantera del coche de la cuadrilla durante meses, se cayó en la bañera con espuma del batería, pero, si bien no catapultó al grupo directamente a la gloria, al menos facilitó unos cuantos bolos en pueblos, fiestas y discotecas.

Lo que Star esperaba, en el fondo, era la subvención del grupo por parte de alguna de las marcas comerciales cuyos estribillos cantaba, pero tal vez por aquél entonces era un adelantado a su tiempo. Lo había intentado con Maggi, con Gallina Blanca, con Mister Proper y luego con el propio Don Limpio, sin ningún resultado.

Muchos le decían que cambiase de aspecto o que viajase a la capital, que tal vez Bilbao era una ciudad muy conservadora para su boa de plumas de marabú, pero él insistía en pintarse los ojos como las órbitas de una calavera sobre una espesa máscara de maquillaje blanco que se cuarteaba en los días de sirimiri.

Nadie llamó a la puerta de Star Lux, y al no lograr convertirse, a pesar de todos su esfuerzos, en una banda comercial, los Butterfly Pillows se disolvieron como tantos otros grupos, sin concierto de despedida. El batería llegó a dirigir un supermercado antes de emigrar a Sudamérica.

El guitarrista trabaja como jefe de planta en unos grandes almacenes. El bajo se ha casado con la hija de un importante empresario. Y Star Lux, que ahora se hace llamar simplemente Estanislao Lucas Iturrigorrigoikomendikortaurrutia, no soporta el concentrado de carne.

Enrique Mochales, escritor y pintor. Su blog Como sujetar un cocodrilo en Hechos de Hoy supone una novedosa iniciativa de incisivo columnista en el escenario digital. Entre su obra, Mermelada amarga (Ed, Margen cultural, 1993); La fragilidad de la porcelana (Ed. Alberdania, 2010), y Esclavo de la luz (Ed. Punto Rojo, 2013).

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