El FC Barcelona se afianzó aún más en el liderato de la Liga con su abultada victoria sobre el Espanyol (4-0) en el partido correspondiente a la decimoctava jornada del campeonato. Fue además el día del regreso al banquillo de Tito Vilanova, que al parecer podrá reanudar su actividad habitual como primer técnico de la plantilla según apuntaba Hechos de Hoy la semana pasada.
Los jugadores azulgranas continúan su camino hacia la conquista de la Liga de manera imperturbable, manteniendo su condición de invictos y aumentando todavía más su distancia (once puntos) con el segundo clasificado, el Atlético de Madrid, que empató en Mallorca.
El Espanyol, por su parte, llegó al derbi catalán con la idea de sacar algún punto al líder pero la alegría les duró nueve minutos, el tiempo que tardó el Barça en abrir el marcador. Con esta derrota, los periquitos se mantienen en puestos de descenso y termina con la racha de cuatro partidos sin perder.
En la primera mitad, el Barça comenzó muy ofensivo, controlando el juego y acercándose con peligro a la meta de Kiko Casilla. Iniesta, tras una gran jugada de equipo, dio un pase raso a Xavi desde la banda y éste en el área pequeña batió a placer al meta ´perico´ en el minuto 9.
Sin dar tiempo para la reacción, Pedro volvió a rematar en el área pequeña tras una gran jugada de Cesc que supuso el 2-0 para los locales seis minutos después. Casilla salvó el segundo minutos antes del gol de Pedro con una gran parada a un disparo de Iniesta.
Messi sigue con su racha
Con el Espanyol hundido intentando defenderse de las acometidas culés, Busquets aprovechó el hueco que le facilitó la defensa perica para dar un pase raso a Pedro desde el centro del campo que aprovechó el canario para poner el tercero con una vaselina (3-0).
Dos minutos después, el colegiado pitó penalti tras un derribo de Casilla a Cesc dentro del área que transformó Leo Messi sumando su primer gol en 2013 y vigésimo sexto en la Liga. El Barça controló el encuentro en los últimos minutos buscando el descanso tras sentenciar a los de Javier Aguirre.
En la segunda parte y con el partido resuelto, el FC Barcelona se limitó a mover el balón y a crear ocasiones sin demasiada intensidad mientras que los pericos buscaron el gol mediante contragolpes que no llegaron a buen puerto. En el ecuador de la segunda mitad Pedro marcó en dos ocasiones el que hubiese sido su tercer gol, pero el árbitro los anuló por fuera de juego. En los últimos minutos Messi y Villa pudieron marcar el quinto.
Messi, que en unas horas sabrá si consigue su cuarto balón de oro este lunes, empezó el año igual que lo terminó, marcando. El pichichi de la temporada pasada sumó su gol número 26 en la competición liguera, y el primero del nuevo año tras los 91 que anotó en 2012. Además, el goleador argentino pudo firmar un doblete si el libre directo que lanzó en la parte final de la segunda mitad no se hubiese estrellado en el larguero.