Rihanna está de enhorabuena. Además de ser una de las cantantes con mayor éxito de todos los tiempos, su trabajo ayudando a los más necesitados le ha servido para ganarse el reconocimiento de la Fundación Harvard.
Así, la de Barbados se llevará el premio Humanitario del año. La intérprete, de 29 años, recibirá el reconocimiento Peter J. Gomes Humanitarian Award en el campus de Massachusetts de la célebre universidad.
“Rihanna ha construido caritativamente un centro de última generación dedicado a la oncología y la medicina nuclear para diagnosticar y tratar el cáncer de mama en el Hospital Queen Elizabeth en Bridgetown, Barbados”, comentó Allen Counter, director de la Fundación Harvard.
Del mismo modo, la cantante participó en la creación de un programa de becas de la Fundación Clara y Lionel para apoyar económicamente a jóvenes caribeños que quieren estudiar en Estados Unidos.
“Poder regalar educación es todo un honor”, recalcó Rihanna al mismo tiempo que reconoció que "la educación superior otorga perspectiva y oportunidades. Estoy muy contenta de poder participar en esto”.
Además, dirige una campaña que busca que niños de al menos 60 países tengan acceso a la educación (teniendo como prioridad a las niñas). Rihanna creó su fundación en 2012 en honor a sus abuelos, Clara y Lionel Braithwaite, y financia proyectos enfocados a la salud, la educación, el arte y la cultura.
Donde hubo fuego…
En el terreno amoroso, Rihanna no siempre ha tenido suerte pero lo cierto es que su relación con Drake no puede olvidarse de la noche a la mañana. Lo cierto es que componen una de esas parejas que cuando están juntos levantan todo tipo de pasiones.
Han protagonizado tantos momentos, la mayoría derivados de una colaboración musical (What's my name en 2010, Take Care en 2012 y Work en 2016), por lo que es difícil creer que lo suyo tenga punto final.
"Ninguno de mis ex está casado o mantiene una relación feliz, así que puedo decir con seguridad que yo no fui el problema", declaró en más de una ocasión la cantante de Barbados. Sin embargo, el último mensaje de Drake hace que ese mensaje quede en el olvido.
El artista quiso felicitarla por su 29 cumpleaños desde lo alto del escenario, plenamente consciente de la acogida que tendrían sus palabras y de cómo viajarían a la velocidad de la luz hasta su destinataria. "Hoy es el cumpleaños de alguien a quien le tengo mucho amor y respeto. Así que en lugar de cantar Happy Birthday, vamos a hacer esto Dublín (y se arrancó a cantar Work)". Ya dice el refrán: donde hubo fuego, siempre quedan cenizas.