Haití fue el primer país de América con independencia política en 1804 de su madre patria, Francia. Estuvo bajo la potestad de esta potencia europea desde el siglo XVII. En 1697 España cedió a los franceses 1/3 de la isla Hispaniola.
Los franceses implantaron una economía basada en el azúcar y la foresta trayendo miles de esclavos africanos. Haití se consideraba la isla más rica del Caribe. En el siglo XVIII Toussaint Louverture se alzó en contra del dominio francés, liberando los esclavos negros, estimados en más de 500.000 en esa época.
Aunque, Francia fue desalojada de esa parte de la isla, cobró un alto peaje al pueblo haitiano que duró 100 años. Haití comparte con el país una franja fronteriza de 376 kilómetros y una línea costera de 1.777 kilómetros, respectivamente.
La historia haitiana está llena de una rica narrativa a pesar de sus vicisitudes y constante inestabilidad política que le ha ganado el puesto de la nación más pobre del continente.
Se estima extraoficialmente que más de 1,5 millones de haitianos han emigrado, la mayoría de forma ilegal, a la República Dominicana. Cientos de miles residen en Canadá, Francia, Estados Unidos y últimamente en Chile, Brasil, Guyana y otros países.
Con su vecino la República Dominicana, sus relaciones han sido de altas y bajas y se han firmado varios acuerdos dirigidos a una política de buena vecindad para preservar la paz y la amistad entre los dos pueblos. Citamos algunos:
– El Tratado de Nimega de 1678 que fue legitimado por el Tratado de Rijwijk de 1697 donde España aceptaba la existencia de dos colonias dentro de la Hispaniola.
– Los Tratados de Aranjuez de 1777 y de Basilea de 1795 que santificaron la delimitación territorial de ambas naciones.
– Otros acuerdos fueron, el Tratado Fronterizo del 21 de enero de 1929 firmado por Horacio Vásquez y Louis Borno ratificado por Trujillo y Sténio Vincent en 1936.
– Bajo esos convenios, República Dominicana perdió 6.200 kms2 (8%) de su territorio.
– Otros acuerdos son, Jimaní-Malpasse de 1958 y recientemente, la declaración Abinader-Moise, enero 2021.