Lo ha hecho para estar presente en la graduación de su hija mayor en California. Es su primera ausencia del Open desde 1993. Phil Mickelson había aguardado hasta el último momento con la esperanza de una posible larga demora debida a condiciones meteorológicas. Pero la mañana del jueves saludó a Erin Hills con cielos claros y el cinco veces ganador de un major retiró oficialmente su tarjeta de Wisconsin.

El jugador que cumple este viernes 47 años de edad, es un veterano con 26 apariciones en el  US Open – 23 de forma consecutiva – pero ahora tendrá que esperar otro año para tratar de completar el Grand Slam.

Con victorias en el Masters (2004, 2006, 2010), el PGA Championship (2005) y el Open Championship (2013) el US Open sigue siendo el trofeo que más ambiciona.
Ha sido subcampeón en 1999, 2002, 2004, 2006, 2009 y 2013.

“Obviamente es un torneo que quiero ganar más, y la única manera de ganar es jugándolo”,  ha dicho recientemente Mickelson. “Pero esto (la graduación de su hija Amanda) es uno de esos momentos en los que miras hacia atrás en la vida y simplemente no me lo puede perder. Estaré muy contento de estar allí y estar presente“.

Amanda Mickelson, de 17 años, como presidenta del Pacific Ridge School en Carlsbad era además la encargada de dar el discurso de esta mañana.

Hasta aquí la noticia. Pero llueve sobre mojado, no en Erin Hills, sino en este tipo de decisiones de Phil en las que prioriza la familia.

El 20 de mayo de 2009, se conoció que a Amy, la esposa de Mickelson, le había sido diagnosticado un cáncer de mama y Phil anunció que iba a suspender su agenda del PGA Tour indefinidamente. Ella comenzaría el tratamiento con cirugía mayor en las dos semanas siguientes. Mickelson tenía programado jugar el HP Byron Nelson Championship del 21 al 24 de mayo, y defender su título en el  Colonial Invitational una semana después. Él dijo adiós a ambos eventos.

El 6 de julio de 2009, se anunció que su madre, Mary Mickelson, fue diagnosticada de cáncer de mama y sería sometida a operación en el mismo hospital donde había sido tratada su esposa. Nuevamente se ausentó del PGA Tour y faltó al Open Championship de Turnberry.

Es muy conocido también lo ocurrido en 1999 en Pinehurst; por entonces Phil, con 29 años y sin una victoria importante, estaba disputando una eventual victoria con Payne Stewart. Mientras tanto, su esposa, Amy, iba a dar a luz en Arizona a la primera hija de la pareja, Amanda. El caddie de Phil recibió un mensáfono (beeper) y Phil le advirtió que viniera a buscarlo si aquello sonaba, no importaba por qué. Phil incluso le dijo a un reportero, “si el mensáfono suena estoy fuera de aquí. No hay discusión”. Pero la niña nació un día después.

En 2013, Lefty, como es conocido, voló desde Pennsylvania, donde se celebraba el US Open hasta California para estar presente en la graduación del colegio de esta misma hija Amanda que tenía lugar el día anterior del comienzo del torneo. Después de asistir a la ceremonia y al discurso de su niña volvió a Pennsylvania para llegar justo a tiempo de jugar; en esa ocasión volvió a quedar segundo, detrás de Justin Rose.

Del año 1969 es una canción de Víctor Jara: Te Recuerdo Amanda, con alguna estrofa muy para el caso “La sonrisa ancha/la lluvia en el pelo/no importaba nada/ibas a encontrarte con él/con él, con él, con él/son cinco minutos/la vida es eterna/en cinco minutos”.

Quizás una noche, en medio de tu activismo seas tú, Amanda, quien escribas una canción a tu padre que, literalmente ha volado detrás de ti, de tu madre y de la familia. “Te recuerdo Lefty/Volando con las alas del valor/la sonrisa amplia/la mano tendida/la firmeza en el gesto..

Ahora pasará un año para que Phil Mickelson intente llevar a la vitrina el  trofeo del US Open del que fue segundo en seis ocasiones. Probablemente es más difícil quedar seis veces segundo que ganar una vez. En cualquier caso, dormirá en California y soñará con Amy, y sus hijos Amanda, Sophia y Evan.

California dreamin’
All the leaves are brown
And the sky is grey
I’ve been for a walk…

Lo cierto es que para muchos, como para el colega de golf que desayunaba conmigo en la Terraza Oeste de la Casa Club, Phil Mickelson ya ha hecho el birdie de su vida. Y una vida de campeonato, le he añadido yo. Ganar la familia es el reto definitivo de esta sociedad.