Actualmente, en lo que se refiere a negocios, Internet ha nivelado el campo de juego. Cualquiera con un ordenador puede comenzar un negocio en línea para ganar dinero. Pero el detalle es que no se necesita experiencia técnica. No hay que saber cómo crear sitios web, no se requiere de programación en absoluto.

También puedes vivir en cualquier lugar que desees, establecer tu propio horario y trabajar tanto o tan poco como quieras, dependiendo de lo rápido o grande que quieras que crezca tu negocio. Tampoco se necesita experiencia comercial o de marketing. Es un medio verdaderamente democrático para el emprendimiento.

Lo mejor de todo, a diferencia de un negocio tradicional, es que no necesitas mucho capital de inicio. De hecho, puedes poner en marcha muchas empresas en internet sin ningún dinero, ya que muchos servicios gratuitos lo facilitan. Por ejemplo, puedes configurar un sitio web o blog de forma gratuita con WordPress.

O puedes aprovechar un sitio de terceros como Amazon o eBay para vender productos. Utilizas su plataforma de venta a cambio de darles un porcentaje de tus ventas. Y este es solo el comienzo de las muchas soluciones de inicio de comercio electrónico sin dinero disponibles. Consideremos dos de las principales formas de ganar dinero en línea con poco o ningún costo.

1. Drop shipping

La idea básica detrás de un negocio de envío directo en línea es que, como propietario de una pequeña empresa, no tienes que mantener un gran inventario de productos o manejar cualquier entrega a tus clientes.

Eso elimina el costo financiero y el riesgo de tener un almacén lleno de cosas que quizás no vendas, y la molestia de organizar el envío de pedidos en todo el país o el mundo.
En cambio, trabajas con una empresa que se especializa en el envío directo. Así es como funciona: Enumera los productos a la venta en tu sitio web o en una plataforma como Amazon, eBay o Etsy.

Cuando uno de tus clientes realiza una compra, tu compras el producto a una empresa externa (el despachador de envíos, generalmente un fabricante o mayorista) por un precio más bajo. Este proceso es tan simple como reenviar el pedido a su cliente, un proceso que en realidad puede ser completamente automatizado. Luego, tu expedidor de envío hace llegar el producto al cliente.

Lo suficientemente fácil, ¿verdad? Con el envío directo puedes ofrecer una amplia gama de productos, por lo que los gastos operativos de tu empresa son muy bajos.

2. Marketing afiliado

El marketing de afiliación es algo similar al envío directo, pero con algunas diferencias clave. Con este modelo de comercio electrónico, nuevamente no mantienes un inventario de tus propios productos, y no tienes que preocuparte por el envío de productos a los clientes.

Básicamente, eliges un nicho rentable para tu negocio en línea y luego encuentras un socio afiliado que tiene productos disponibles en ese nicho. Algunos de los sitios afiliados más populares son Clickbank.com, Amazon.com y CJ Affiliate by Conversant (anteriormente Commission Junction). Entre ellos, ofrecen casi cualquier producto de información digital (como libros electrónicos, archivos de audio, archivos de video) o producto físico que te puedas imaginar.

Tu ofreces los productos para la venta, por ejemplo, en tu blog o sitio web de comercio electrónico. Cada producto tiene un enlace único que rastrea de vuelta a tu cuenta con tu socio afiliado.

Un cliente potencial que hace clic en el enlace se dirige al carrito de compras de tu socio para realizar el pago. Una vez que compran, esa compra se registra y tú recibes una comisión. Varía según el socio afiliado, pero generalmente es del 5 al 25 por ciento, o el 50 por ciento o más con productos de información digital. Como puedes ver, hay poco riesgo de tu parte y prácticamente tampoco necesita inversión.

Todo lo que tienes que hacer es manejar el marketing para que tus clientes compren (a través de las redes sociales, el marketing por correo electrónico, los blogs o el método que elijas). Pero después de que hagan clic en el enlace de afiliado, quedará fuera de tus manos. No tienes que enviar productos ni atender preguntas de servicio al cliente. Y ciertamente no tienes que mantener un inventario.

Todo lo que tienes que hacer es centrarte en las formas de pago para comercializar tu negocio en línea.
 

Edith Gómez es editora en Gananci, apasionada del marketing digital, especializada en comunicación online. Se niega a irse a la cama cada noche sin haber aprendido algo nuevo. Le inquietan las ideas de negocio y, más aún, aportar una mirada creativa al pequeño mundo en el que vivimos.
Twitter: @edigomben