Pero el titular que más le gusta a mi romántica prima Margarita, y que no voy a poner, es este: “El regalo de boda Sofia Lundstedt, se termina en China”. Sofia es la novia de Rafa. Se casan el próximo fin de semana y el regalo chino sería ese espectacular juego del canario en el último día. O la sonrisa que ha construido al terminar.
Rafa Cabrera Bello iba en partido estelar. Conocía por tanto lo que pasaba delante. Él iba -11 y, en el partido precedente, Ormsby -12. En el último hoyo el australiano, que también tiene nervios, comete bogey. Al canario le bastaba el par para forzar el desempate y hubiese ganado con un birdie. Rafa, en una putt parecido al que minutos antes hizo su competidor, también terminó con bogey para quedar segundo empatado.
Efectivamente, el trofeo hubiera sido un buen regalo de boda para Sofia Lundstedt, su novia. Pero supongo que el regalo para ella será el propio Rafa, su carácter y su pundonor. Si Golf & Manners tiene algún sentido es por gestos, modos y maneras de hacerse a sí mismo como las de Rafa “Nunca Me Rindo” Cabrera Bello.
Sí, es verdad que también es “No Siempre Acierto”. Pero, ¿quién lo hace? Nadie acierta siempre en todo swing si es golfista; ni en toda frase cuando es escritor; ni en toda palabra de amistad; ni en la decisión cabal como directivo; ni en el perdón perfecto cuando ofendiste; ni en el silencio oportuno; ni en la broma graciosa o en el olvido hasta la amnesia de un amor perdido. No siempre acertamos del todo en todo.
Mas la cuestión es, ya se trate de golf, amor, amistad, trabajo o simple felicidad, no rendirse. Volver es una palabra justa cuando uno se ha salido de madre.
Esto en el golf es muy evidente aunque, paradójicamente, no lo veamos. Se dice que el golf es el deporte de la humildad.
Porque el sostenella y no enmedella es soberbia, también en ejercicios de habilidad. Es soberbia o necedad. Ante una operación que produce un error hay poca sensatez en la reincidencia. Sólo los niños y los locos repiten la misma acción pretendiendo lograr un resultado diferente al de las veces anteriores.
A quienes hemos seguido a Rafa nos ha parecido ver que “nunca me rindo” es una lógica llena de fe en quienes le apoyan y son prudentes. Sus maestros y su familia. Y su corazón de incandescente lava atlántica. Porque no rendirse es fino acierto cuando la misión y el objetivo están bien elegidos.
Algo de eso traduzco de su último tuit enormemente gráfico escrito en inglés: en una foto de un iceberg, sobre la parte que asoma por encima de la superficie marina, ha escrito Rafa: “Esta ha sido mi exitosa temporada. Me siento orgulloso con lo que he sido afortunado de alcanzar”. Y, sobreimpreso en la parte del iceberg que permanece hundida – la que supone el 90% del total – se lee el siguiente texto: “Nunca hubiera sido posible sin Sofia, Papá y Mamá, Miguel y Emma, Richard, David L, Colin, David D, Chris H, Chris S, Emilio, Emilio P, sponsors, amigos y colegas”.
Miguel y Emma son sus hermanos; David Leadbetter, su actual maestro; Colin Byrne, su caddie; Chris Henry preparador mental y Emilio Pereira, preparador físico.
Es decir, pocas horas después de terminar su último partido del año 2017, Rafa recuerda, agradecido y por sus nombres, a quienes cerca de él, en la raíz de sus triunfos, le impulsan hacia arriba. Es más, los considera la parte más importante de una temporada exitosa.
El golf como deporte profesional es una actividad individual, pero de equipo. No hay contradicción: entre la bola y el hoyo solamente existen la gravedad y el aire. Y frente a ambos el jugador. Pero con ese jugador, que en ese instante respira soledad, está un equipo de familia, preparadores, patrocinadores, maestro y caddie. Y a lo mejor algo de usted. Y algo de mí.
Entre las fotos del escudo del Hong Kong Golf Club, al pié del dragón chino del escudo del club, coronado por la fecha de fundación – 1889 – hay un lema muy sugerente. Suele atribuírsele al primer emperador romano, Augusto, como lema personal, y es éste: “Festina Lente”, oxímoron latino que significa “apresúrate lentamente”.
Podría aplicárselo, en broma, Wade Ormsby, ganador del UBS Hong Kong Open: ha tardado 264 apariciones en triunfar en el Circuito Europeo. Pero también puede hacerlo lema suyo Rafa por lo concienzudo de su trabajo en equipo, muy profesional.
Y, por qué no, a nosotros que jugamos o vivimos muchas veces bajo presión; hay una aplicación del Festina Lente que atañe a las tareas profundas y que me resulta especialmente inspirador: “alma, calma”.