Los ingredientes
– 1 lámina redonda de hojaldre fresco o congelado*
– 1 kilo de manzanas tipo Reineta, Golden o Granny Smith no muy grandes
– 50 gramos de mantequilla
– 150 gramos de azúcar moreno
– 1 limón
* También se puede hacer con una lámina de pasta quebrada
La preparación
Echar la mantequilla en copos junto con el azúcar en el fondo de un molde redondo bajo. Introducir en el horno precalentado a 200º durante unos 10 a 15 minutos. (También se puede derretir la mantequilla a fuego lento en un cazo y añadir el azúcar batiendo con las varillas hasta obtener el caramelo para echar en el fondo del molde).
Pelar las manzanas, partir en cuartos y eliminar la parte central. Ir rociando los cuartos con un poco de zumo de limón para que no oscurezcan.
Sacar el molde del horno cuando se haya caramelizado el azúcar con la mantequilla.
Colocar los cuartos de manzana sobre el azúcar caramelizado en el molde lo más apretadas posible. Espolvorear con otro poco de azúcar y volver a meter en el horno a media altura durante 20 minutos a unos 180 grados.
Sacar de nuevo el molde del horno, dejar que se enfríe 3 o 4 minutos. Colocar entonce la lámina de hojaldre sobre las manzanas. Meter un poco por los lados y hacer en el medio un pequeño agujero para que pueda salir el vapor.
Hornear durante otros 20 minutos hasta que las manzanas acaben de caramelizarse y la masa se dore.
Sacar del horno, dejar enfríar cinco minutos y desmoldar en una fuente redonda con cuidado de no quemarse.
Servir aún templada con nata líquida.