El Festival de Venecia está dejando recuerdos imborrables, y no solo en el ámbito cinematográficos, sino también en la esperada alfombra roja. Es el caso de Jennifer Lawrence y Michelle Pfeiffer que desfilaron con sus mejores galas y derrocharon estilo. 

Para el día, Lawrence escogió un vestido tobillero negro de encaje con un gran escote vertical de Giambattistaa Valli. La actriz lo completó con unas sandalias oscuras de tacón con cristales dando un toque totalmente elegante y romántico. 

Por su parte, Pfeiffer no se quedó atrás y apostó por una pieza negra con maxi estampado floral. El traje era de manga abullonada y faldad corte sirena con fruncidos. Un look que también dio cierto carácter italiano. La actriz optó por el sello de Dolce & Gabbana. 

Para la noche, Lawrence paseó por la alfombra roja un vaporoso vestido de tul, espalda en forma de V y escote redondo, que dejaba ver una discreta cadenilla al cuello a juego con unos pequeños pendientes. Barden, de traje negro de corte clásico y camisa blanca. 

Pfeiffer, pelo suelto y sin joyas, llevaba un vestido de estampado geométrico en negro y dorado con cuello a la caja y abertura posterior que dejaba ver unos zapatos negros con generoso tacón en color oro.

Tampoco se quedaron atrás Susan Sarandon, Helen Mirren y Judie Dench. La primera, a sus 70 años, se atrevió con una abertura generosa en el lado derecho de su vestido que dejó al descubierto unas excelentes piernas, que no renuncia a lucir. Un generoso escote y unos pendientes de diamantes complementan un estilismo que la hizo brillar como una de las más elegantes de Venecia.

Helen Mirren, presentó en el festival The Leisure Seeker, una película por la que aspira a la Copa Volpi de la Mostra, que ya se llevó a casa en 2006 por su interpretación en The Queen (La Reina) y por la que también consiguió el Oscar. Mirren llevó a la gala la elegancia que da el cabello plateado y lució un vestido en raso con brocado en azabache y escote en pico.

Judi Dench sabe muy bien cómo mover pesados trajes. En Venecia vuelve a defender a la reina Victoria, su personaje en Victoria & Abdul, un personaje al que ya dio vida hace 20 años en otra película.  Con un vestido y abrigo ligero a juego en blanco, con zapato escaso de tacón, pero con un moderno corte de pelo y una mirada incisiva, pero dulce, la actriz demostró ser una auténtica “reina” sobre la pasarela.