Aunque no será hasta febrero cuando se estrene la esperada adaptación al cine de la novela erótica de E.L. James, 50 sombras de Grey, lo cierto es que ya han comenzado a surgir algunas de las informaciones de las nuevas películas que llegarán después de la primera entrega que, sin duda, provocará todo tipo de opiniones.
Hace unos días saltaba la noticia en los medios de comunicación que Rita Ora había firmado un contrato con la productora Universal para participar en los dos filmes que seguirán al primero, por lo que parece confirmado que la historia de Christian y Anastasia se llevará por completo a la gran pantalla.
Sin embargo, hace solo unas horas se confirmó la presencia de Kendall Jenner, la hermana pequeña de Kim Kardashian en los dos futuros proyectos. Según revela la revista Grazia, la modelo de 18 años y sus agentes han iniciado negociaciones con la productora de 50 sombras de Grey para formar parte de las dos secuelas.
A Universal le gustaría que Kendall esté presente en las nuevas producciones, así que llamaron a sus agentes para organizar una reunión el mes pasado, y la cosa parece que fue muy bien”, explica una fuente cercana a la joven. De hecho ha sido la directora de la película Sam Taylor-Johnson quien la quiso en el rodaje.
“Sam está fascinada con ella y quiso que apareciera en la primera película, aunque finalmente no fue así”, prosiguió la fuente. Si finalmente se confirmara su incorporación, Kendall Jenner daría un gran paso en su carrera puesto que siempre ha soñado con introducirse en el mundo de Hollywood.
Sin embargo, no todo es bonito en el mundo de las hermanas Jenner. Hace unos días Kendall Jenner protagonizó una escena que está muy lejos de la imagen de chica educada y refinada a la que tiene acostumbrados a todo el mundo.
La estrella televisiva y reciente modelo se encontraba en el restaurante Mercer Kitchen de Nueva York acompañada de su inseparable y mejor amiga Hailey Baldwin, cuando ambas decidieron salir del local sin pagar. Fue ahí cuando la camarera decidió salir tras las jóvenes para reclamar el precio de la comida.
Kendall, aparentemente afectada por la actitud de Morris, le lanzó el dinero a la cara provocando el disgusto y la vergüenza de Blaine. "Ese horrible momento en el que persigues a una Kardashian por la calle porque se ha olvidado de pagar la cuenta, y te lanza el dinero en la cara”, escribió la camarera en Twitter.