Los ingredientes

– 4 manzanas
– 4 morcillas de sangre
– 100 ml de calvados
– 3 cucharadas de margarina para las manzanas
– 2 cucharadas de margarina para las morcillas
– 1 pizca de sal

La preparación

Lavar y pelar las manzanas y cortarlas en gajos. Calentar la margarina o mantequilla en una sartén y freír las manzanas con una pizca de sal. Remover bien para que se doren un poco por todos los lados.

Calentar el resto de margarina en otra sartén y freír las morcillas.

Mezclar el calvados con dos cucharadas de la grasa que sueltan las morcillas y calentarlo en un cacito.

Servir las morcillas colocadas sobre las lonchas de manzana, todo ello en una fuente resistente al fuego.

Llevar la fuente a la mesa, apagar la luz y flambear las morcillas y manzanas con el calvados.

Ojo en el momento de flambear las morcillas porque la llamarada puede ser alta