La noticia de la muerte de Jesús Mariñas, a los 79 años, ha calado hondo no sólo en la prensa del corazón. Nacido el 3 de octubre de 1942 en A Coruña, este cronista de la prensa rosa siempre destacó por ser único y diferente a los demás. Un periodista de los de la vieja escuela que hasta hace poco  acudía siempre en persona, con su pequeña cámara de fotos, a los sitios para escribir o hablar en la radio y la televisión de lo que había visto. "Valgo más por lo que callo que por lo que cuento", dijo en muchas ocasiones.

Jesús Mariñas fue un avanzado de la magia nacida en la isla de Ibiza, de sus calas turquesas, sus casas encaladas y el ambiente único en las noches del puerto que tanto amaban Cayetana, la duquesa de Alba, y su marido Jesús Aguirre, y que visitaba en su Rolls Royce color rosa Xavier Cugat. Esa Ibiza profunda siempre la llevó en el corazón como el escenario de las historias secretas y las mayores exclusivas veraniegas.

Durante dos años, Jesús Mariñas luchó contra un cáncer de vejiga del que no comentó nada en público hasta mucho tiempo después de ser diagnosticado. El maestro del corazón falleció este martes en el hospital Ramón y Cajal de Madrid, donde se encontraba hospitalizado desde hace más de un mes, debido a complicaciones relacionadas con su enfermedad. Junto a él, en todo momento, su marido, el fotógrafo venezolano Elio Valderrama. Ambos fueron compañeros de viaje durante casi 30 años.

Mariñas, el hombre de las camisas imposibles cuando todavía los hombres no vestían de florecitas o de rayas de colores chillones, ha dejado un enorme vacío en el mundo del papel couché. La reacción en redes sociales de muchos de sus compañeros y amigos de profesión como Karmele Marchante, Chelo García Cortés, Lydia Lozano, María Patiño, Víctor Sandoval, Joaquín Prat o Alessandro Lequio, han querido rendir una cálida despedida al que fuera uno de los creadores del periodismo rosa en España. 

En sus comienzos trabajó en Garbo, Fotogramas, Época y Pronto, compaginándolo con programas de radio como  Protagonistas de Luis del Olmo o el programa de Encarna Sánchez.

María Teresa Campos contó con él en Pasa la vida, en los años noventa en TVE, y a partir de 1996 se fue con ella a Telecinco para colaborar en Día a día. Destacaron sus agarradas con Karmele Merchante en el programa Tómbola de Canal Nou, presentado por Ximo Rovira. "Qué te calles, Karmele" fue una frase que se hizo "viral" cuando esas cosas todavía no se llamaban así. 

Trabajó en otro programa que hizo furor en Antena 3, ¿Dónde estás corazón? (2007-2011) abreviado después como DEC. Presentó junto a María Patiño Vaya par y después colaboró muchos años en Espejo público, siempre con su toque especial, su ironía y también su mal genio en muchas ocasiones. Desde 1998 contaba con una columna muy leída en La Razón, titulada De todo corazón.

Hace unos meses, el periodista más temido del cuore ajustaba cuentas también con él mismo en Jesús por Mariñas, Memorias desde el corazón publicadas por La Esfera. En el libro habla de los grandes de otras épocas como Carmiña Ordóñez, Concha Velasco, Rocío Jurado, Julio Iglesias o el propio rey Juan Carlos, personajes muy diferentes a los personajillos actuales de realities y programas intrascendentes de televisión. 

Jesús Mariñas será incinerado este miércoles, y su último deseo fue que sus cenizas reposen junto a los restos mortales de su madre, en La Coruña.