El jefe de la Oposición y presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, en el sprint final de una campaña con mensajes llenos de ilusión, fuerza y cambio como ha destacado Hechos de Hoy.

Ha propuesto abandonar el procés definitivamente apostando por “el voto del cambio” que representa el PPC . “Si los catalanes quieren que las cosas cambien, han de cambiar su voto. Si quieren no proseguir con estos mismos resultados, han de modificar el voto que mayoritariamente daban a los partidos que han traído estos resultados”.

Avisó de que las políticas socialistas y del procés no tienen como objetivo Cataluña ni a los ciudadanos, “sino los problemas personales y la debilidad política de Sánchez”.

“El voto de cambio es el de Alejandro Fernández, mientras que los votos para el PSC son votos para apuntalar el Gobierno débil e inestable del Partido Socialista en la Administración Central”.

Explicó que el Plan para Cataluña del PP está orientado a la generación de riqueza, a la creación de empresas, a la producción e inversión y al adelgazamiento de la Generalitat. El objetivo es “poder bajar impuestos a los ciudadanos, recaudar más, invertir más, ofrecer mejores servicios y reducir los porcentajes de pobreza” en una comunidad donde 1 de cada 4 catalanes está en esta situación de riesgo

“Tenemos que buscar riqueza y no expulsarla, conseguir que se queden las empresas y que vuelvan las que se han ido, rebajar los impuestos, desburocratizar la Generalitat y acreditar seguridad jurídica en las comunidades autónomas”.

Propuso el modelo del PP para los que están preocupados por la okupación, la calidad de los servicios públicos, la sequía o el éxodo de las empresas. En este sentido, recomendó a los catalanes que no sigan votando a los modelos de ERC, el PSC o Junts “porque es evidente que no son capaces de afrontar estas cuestiones”.

Criticó la poca sensibilidad del Gobierno de España con el sector del vino en Bruselas, donde el PPE ha tenido que parar con sus votos y las alianzas que ha obtenido Dolors Montserrat un sistema de etiquetado “alarmista”.

“Hacemos votos por la racionalidad y sensibilidad con un sector determinante para España, Cataluña y el sur de Europa que pretende cuidar la tierra, parar la desertización, hacer un equilibrio medioambiental, crear riqueza y empleo y mantener población en el ámbito rural”.

Subrayó que el voto para resolver los problemas de Sánchez no soluciona la sequía, al igual que no lo hace el procés. “Lo soluciona un plan de infraestructuras hídricas con una política de cambio”, sentenció.