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¿CEREMONIA RELIGIOSA EN LA NIEVE?

Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo, la boda más secreta del año

Matrimonio civil envuelto en el misterio del hijo de Carolina de Mónaco que recientemente la convirtió en abuela. Andrea y Tatiana ya son marido y mujer.

Hechosdehoy / Angelika Knüppel
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El hijo de Carolina de Mónaco ha logrado una boda que probablemente haya envidiado y hubiera querido para sí Charlene Wittstock. Privacidad absoluta, pocos invitados -400 no son nada en comparación con la boda de hace dos años en el palacio de los Grimaldi entre la nadadora sudafricana y Alberto de Mónaco– y ante todo, nada de prensa.

Un sueño hecho realidad para Tatania Santo Domingo, la rica heredera de origen colombiano que convirtió hace unos meses en abuela a Carolina de Mónaco. La joven madre y su príncipe, el guapo "hippy" Andrea, se dieron el "oui" un poco antes del mediodía de este sábado, como se dedujo de los aplausos que se pudieron escuchar en las cercanías donde la prensa anduvo pendiente hasta del detalle más nimio porque lo que es información oficial, a lo largo de la mañana no hubo ninguna. Sólo a última hora de la tarde unas fotos de familia en la gran escalinata y de la pareja, anticipo de la exclusiva que se publicará la próxima semana.

La pareja, ambos de 29 años, pidieron a su madre y a su tío Alberto una boda civil y sin cámaras, anunciando a la vez que ya celebrarían una fiesta por todo lo alto el próximo invierno en Gstaad, en Suiza. Lograron imponer su deseo entre los muros del palacio de Montecarlo. Según algunos medios, en especial suizos, es posible que la pareja se case por la iglesia en Gstaad. Podría ser una boda de lo más romántica entre los paisajes nevados que tanto amaba y frecuentemente visitaba la abuela del novio, Grace Kelly, esposa de Rainiero de Mónaco.

Familiares, amigos íntimos, políticos y personalidades del mundo de la cultura recibieron invitaciones con la explícita prohibición de distribuir fotografías en Facebook o Twitter. Pero no ha sido así. Familiares, sobre todo por parte de la novia, no han resistido la tentación de colgar algunas fotos en sus redes sociales. En las pocas fotos de la exclusiva que trascendieron este sábado, se ve a Tatiana con un sencillo traje blanco, muy ibicenco, con escote en pico y manga hasta el codo. Lleva la melena suelta, adornada solamente con una corona de flores. El novio luce muy elegante con traje oscuro un poco brillante, camisa blanca y corbata azul con lunares 

A través de las fotos de los invitados ha trascendido que la recepción tras el enlace ha sido todo menos estirada, más bien una fiesta flower power y hippy alrededor de la piscina del jardín del palacio en la que no corrió el champán sin varios barriles de cerveza monegasca. Gran parte de los invitados han acudido vestidos de forma muy veraniega y un tanto retro. Entre ellos abundaron las gafas de espejo pero redonditas, estilo John Lennon, y anchas patillas, como las de Julio Mario Santo Domingo III, el hermano de Tatiana

Entre los invitados del novio destacó su embarazadísima hermana Carlota y el novio de ésta, el cómico de origen marroquí Gad Elmaleh. Este verano se especuló con que Carlota se casaría dos semanas después de su hermano, en otra boda supersecreta. Sin embargo parece que la pareja se lo ha pensado mejor y esperará a que primero nazca su hijo. Otro protagonista destacado en la ceremonia ha sido el pequeño Sacha, el bebé de Tatiana y Andrea nacido el pasado 21 de marzo. Lo que no hubo es invitados de otras casas reales como hubiera sido lo lógico en la boda de un príncipe de Mónaco.

Su madre pasó la noche anterior a la boda en compañía de sus amigas como trascendió a través de una fotografía publicada en Instagram. Un día antes la tía de Tatiana, Lauren Santo Domingo, publicó una imagen de la despedida de soltera celebrada en un yate frente a las costas de Mónaco a la que también acudió el perro de la novia. Un perro que también acompañó a los novios en la escalinata en el día de su boda.

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