Un mes de agosto de nervios, tensiones y rumores en los hechos de hoy en el PSOE. Hay tres tendencias definidas.
1. Sánchez sopesa un cambio de Gobierno. Si se produce finalmente habrá dos grandes sorpresas.
2. Sánchez tiene informes con sólidos argumentos para adelantar las elecciones generales y juntarlas con las municipales y autonómicas.
3. Todas las encuestas que maneja el PSOE apuntan a un crecimiento al alza, sin techo electoral, del Partido Popular.
En este escenario, la consigna del presidente a sus ministros es la de un ataque sin tregua, en lo político y lo personal, a Alberto Núñez Feijóo.
Ignorante, mentiroso, sectario, incompetente. Todo esto y mucho más es lo que los ministros del Gobierno han llamado ya a Alberto Núñez Feijóo durante el último mes. Es una escalada verbal y de insultos dirigida contra el líder del PP que tiene por objetivo frenar su subida en las encuestas y derribar su imagen de un hombre de buena gestión y política moderada.
Hasta 11 ministros socialistas han participado en esta ofensiva, que nació después de que Pedro Sánchez remodelara la dirección federal del PSOE y cambiara a sus principales portavoces a mediados de julio. Esa revolución llevó posteriormente a un giro en la estrategia de comunicación del partido y del Gobierno para confrontar de una manera más rotunda con el PP para pinchar el efecto Feijóo en los sondeos a nueve meses de las elecciones autonómicas y municipales y año y medio de las generales.