Los ingredientes

– 4 rajas de merluza (también pueden ser lomos o corazones de merluza congelada)
– 4 rebanadas de pan frito
– 2 yemas de huevo
– 1 vaso pequeño de vino blanco
– 1/2 litro de leche
– 4 puerros (sólo lo blanco)
– dos cucharadas de mantequilla
– dos cucharadas de harina
– el zumo de un limón
– sal y pimienta

La preparación

Cortar los puerros en trozos de unos diez centímetros y poner a cocer en agua con sal durante unos 20 minutos o un poquito más. Sacar y reservar.

Untar una fuente de horno con mantequilla y colocar la rajas de merluza saladas por ambos lados. Se rocían con zumo de limón y se coloca una pizca de mantequilla sobre cada una.

Verter el vino en el fondo de la fuente y meter al horno precalentado durante diez minutos. En otra fuente de horno (que se llevará a la mesa) se colocan las cuatro rebanadas de pan frito. Encima de cada una irá una raja de pescado y se coronará con un trozo de puerro.

Preparar una bechamel con la leche, la harina y la mantequilla, sal y pimienta. Se añade el caldo que ha soltado la merluza en la primera fuente de horno.

Se remueve bien y se añaden las dos yemas, desliéndolas primero en un cuenco con un poco de salsa para que no se cuajen. Se añaden el resto de los puerros para que se calienten y se vierte todo con cuidado sobre el pescado.

Meter la fuente otros tres o cuatro minutos al horno y llevar inmediatamente a la mesa.