Wall Street volvió a cerrar con pérdidas y tuvo su peor semana del año. Las acciones han caído en febrero debido a una serie de informes positivos sobre la economía estadounidense, lo que lleva a los inversores a pensar que la Reserva Federal seguirá subiendo los tipos de interés.
Sin duda la inflación no se está enfriando tan rápido como se esperaba.
El S&P 500 bajó un 1,1%, tuvo su peor semana desde principios de diciembre y a su tercera pérdida semanal consecutiva. El índice Dow Jones cayó un 1%, mientras que el índice compuesto Nasdaq perdió un 1,7 por ciento.
El Nikkei 225 japonés fue la excepción, con una subida del 1,3%. El economista Kazuo Ueda, nominado para dirigir el banco central del país, declaró ante los legisladores que está a favor de mantener el tipo de interés de referencia japonés cerca de cero para garantizar un crecimiento estable. Todo ello a pesar de que Japón informó de que su índice de precios al consumo básico, que excluye los volátiles alimentos frescos, registró en enero la mayor subida de los últimos 41 años.
Las Bolsas de Europa cerraron el viernes 24 con fuertes recortes después de que el dato de inflación de Estados Unidos preferido por la Fed superara las previsiones. El IBEX 35 ha logrado aguantar mejor las ventas que el resto de plazas, apoyado por los resultados de Amadeus y Sacyr. Al cierre, ha cedido un 0,33% hasta los 9.201,50 puntos y salda la semana con una pérdida del 1,4%.
Las Bolsas fe Europa han despedido la sesión con sólidos descensos cuando se cumple el aniversario del comienzo de la guerra en Ucrania y con los inversores muy pendientes de la temporada de resultados empresariales y de las referencias macroeconómicas procedentes de Estados Unidos.
El dato más esperado del día ha sido el índice de precios del consumo personal de Esyados Unidos, el PCE, la medida de inflación preferida de la Fed. El PCE subyacente de enero se ha situado en 4,7% interanual, frente al 4,3% esperado. El dato añade presión a la Fed para subir más y durante más tiempo los tipos de interés. Por lo que las ventas se han impuesto tanto en la renta variable como en la renta fija a ambos lados del Atlántico.
Los inversores han recibido con un desplome del 6,52% las cuentas de IAG. Por el contrario, Amadeus ha destacado con un avance del 2,08% tras ganar 664,3 millones de euros en 2022, frente a las pérdidas de más de 122 millones sufridas en 2021.
Telefónica ha prolongado sus recientes avances otro 0,96% y su cotización se acerca ya a los 4 euros por acción. También han subido bancos como Sabadell (+1,11%) y CaixaBank (+0,25%).
Las rentabilidades de la deuda se han disparado tras el mal dato de inflación en Estados Unidos, que puede provocar un endurecimiento de la política monetaria de la Fed. El rendimiento del bund alemán ha subido con fuerza hasta superar el 2,50% y el del bono español a diez años se ha situado por encima del 3,50%. En Estados Unidos, el bono a diez años acaricia ya el nivel del 4%.
El dato de PCE de Estados Unidos ha dado un nuevo impulso al dólar en el mercado de divisas. El euro cede terreno en los 1,05 dólares y la libra esterlina cae a 1,19 dólares. El precio del oro cotiza ya a 1.820 dólares por onza, mientras que el bitcoin se debilita y se acerca de nuevo a los 23.000 dólares.