Haití desde hace años está afectado de una gravísima desertificación en gran parte de su territorio. Millones de árboles han sido talados indiscriminadamente con el propósito de obtener una fuente económica para la supervivencia. La República Dominicana comparte una frontera de 391 kilómetros de longitud con esa nación.

Haití es uno de los países en el mundo más golpeado por la deforestación, lo que constituye un serio y preocupante obstáculo para viabilizar el país hacia senderos de progreso, desarrollo y estabilidad institucional.

Entendemos que a pesar del gran esfuerzo desplegado por la comunidad internacional para ayudar a reconstruir dicha nación después del sismo de 2010, y la enorme cantidad de recursos financieros y técnicos puestos a disposición por gobiernos, organismos internacionales y entidades privadas, poco se hablado de los avances en materia de reforestación en el vecino país.

Sin reforestación no es posible de hablar de rehabilitar el turismo, la agricultura, las fuentes acuíferas, la preservación del medio ambiente, etcétera. La República Dominicana ha sido una abanderada por la reforestación de Haití.

El entonces canciller dominicano Carlos Morales Troncoso, en nombre del gobierno dominicano, expuso la crítica situación del vecino fronterizo cuando abordó el problema en una cumbre de cancilleres del Caribe con la presencia de la otrora secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton, en Barbados.

Otro país que ha ofrecido asistencia para la reforestación de Haití es Francia. Su embajador Pierre Duquesne, jefe de los Asuntos Económicos para la Reconstrucción y el Desarrollo, externó igual preocupación en una reunión internacional de alto nivel sobre la recuperación de Haití auspiciada por Naciones Unidas, celebrada en marzo 2010 en el vecino Santo Domingo.

Estados Unidos también ha expresado la misma preocupación y ha ofrecido apoyo a la reforestación de Haití. El hoy ex senador demócrata Christopher Dodd, quién sirvió en el Cuerpo de Paz y vivió en Monción, pequeña comarca dominicana muy cercana a la frontera dominico-haitiana, fue un ferviente convencido de ese propósito cuando ya le faltaba poco tiempo de anunciar su retiro del Capitolio estadounidense. En una ocasión, compartí con el senador Dodd, la misma preocupación en un encuentro que sostuvimos con dirigentes del Caribe y funcionarios norteamericanos en Hartford, Connecticut, su estado natal.

– Ver también en Hechos de Hoy, Atención de República Dominicana a la nueva relación que se abre con Irán.

– En República Dominicana, el Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (Codia) propuso implementar un programa integral de reforestación de todas las cuencas hidrográficas.