El portavoz y vicesecretario de Cultura del Partido Popular, Borja Sémper, criticó la cesión por parte del Gobierno al Partido Nacionalista Vasco (PNV) de un palacio en París, propiedad del Instituto Cervantes, valorado en 15 millones de euros y cuyo alquiler anual es de otro millón. Lo apuntó durante una visita al Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León (MUSAC), en León, junto a la vicesecretaria de Sanidad y Educación y presidenta provincial, Ester Muñoz.
“No es un Gobierno, es un zoco”, zanjó el portavoz sobre la penúltima cesión de un Pedro Sánchez dispuesto a darle a sus “acreedores”, sus socios nacionalistas e independentistas, lo que sea necesario para mantenerse en el poder. En este caso, un inmueble con “sentencias judiciales del pasado que acreditan que no puede ser cedido” ni al PNV ni al Gobierno vasco
Anticipó que el “vodevil” entre el Gobierno y Junts -avanzado por Hechos de Hoy (sobre nosotros) durará “meses”. “El Gobierno preocupado y ocupado en sus problemas, en su estabilidad parlamentaria, en lugar de estar preocupado de los problemas de los españoles”.
Pidió a Álvaro García Ortiz que deje de “manchar y arrastrar” la Fiscalía General del Estado con su imputación, e instó al Gobierno a “señalarle la puerta de salida” en caso de que no dé “un paso adelante para demostrar una dignidad” que no está exhibiendo, más aún, tras conocerse que buscó “la complicidad de la Policía Nacional para tapar pruebas”.
Subrayó el respeto a la Justicia con el caso Errejón y señaló su intención de “no hacer leña del árbol caído”
Recalcó, no obstante, el mensaje que han desplegado desde sus “púlpitos politicos” durante los últimos años dirigentes como el exportavoz de Sumar en el Congreso, empeñado en señalar “cómo comportarnos, qué comer, cómo debe ser nuestro ocio, cómo deben de ser las relaciones entre hombres y mujeres, cómo se es buena mujer y cómo se es buen hombre”.
“Resultó que casi todo ese discurso era mentira”, apuntó. “Se nos dijo que lo personal era politico, un discurso absolutamente peligrosísimo, y resulta que quienes lo propagaban ni siquiera se lo creían”.
Ester Muñoz, por su parte, señaló la vivenda como uno de los principales problemas de los españoles. Recordó que hay 13 millones de personas que están en riesgo de exclusion social y de pobreza. Y reconoció la responsabilidad del PP como “alternativa” a un Gobierno desafecto con los problemas de los españoles.