La última batalla de Katniss Everdeen está a punto de empezar. Sinsajo. Parte 2 pone punto y final a Los juegos del hambre, con su estreno el 27 de noviembre, a una de las sagas cinematográficas más exitosas de los últimos años. Desde que se estrenó la primera película, en 2012, la adaptación de los libros de Suzanne Collins rompió récords en taquilla y lanzó al estrellato a su protagonista, Jennifer Lawrence.
En la adaptación al cine, el último libro de la trilogía, Sinsajo, se ha dividido en dos películas. La primera de ellas se vio el año pasado, y representaba un notable con lo que habíamos visto en Los juegos del hambre y en En llamas. Ya no había más juegos; Katniss estaba escondida en el Distrito 13, que todo el mundo creía que había sido aniquilado durante la última guerra.
Su labor consistía en participar en diversas acciones de propaganda para movilizar al resto de distritos en la rebelión contra el régimen del presidente Snow. El Capitolio, sin embargo, había capturado a Peeta, su amigo del Distrito 12, y estaba utilizándolo para que fuese contra ella.
La cinta, por supuesto, debe resolver también la relación de Katniss con Gale, su amigo de la infancia, y Peeta, el hijo del panadero que compitió con ella en la arena. El rescate de Peeta de las garras de Snow deja también secuelas, pero saber con quién se quedará Katniss al final no es lo más importante.
Hay que recordar que Los juegos del hambre se sitúan en un futuro distópico en el que Estados Unidos ha quedado reducida a un lugar llamado Panem, formado por trece distritos, cada uno especializado en un sector económico concreto, y el Capitolio, desde donde se gobierna toda la nación.
Los distritos se rebelaron contra la tiranía del Capitolio, pero perdieron la guerra y, como recordatorio, todos los años se celebran Los Juegos del Hambre, una competición de supervivencia, televisada como un gran reality show, en la que dos tributos de cada distrito luchan a muerte, hasta que sólo queda uno.
Katniss es una joven, huérfana de padre, que vive en el Distrito 12, el de la minería, y que se presenta como voluntaria a los Juegos para impedir que vaya su hermana. Ella sólo quiere sobrevivir y ayudar a que su hermana y su madre tengan una vida mejor, pero acaba convertida en el símbolo de una nueva rebelión contra el Capitolio, una que quiere tener éxito allí donde el arrasado Distrito 13 fracasó.
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