Nuevo capítulo en el caso de las tarjetas opacas. La Agencia Tributaria investigará a los 86 directivos de Caja Madrid que usaron tarjetas opacas para conocer la operación que llevaban a cabo al mismo tiempo que elaborarán un seguimiento de los ingresos que obtuvieron presuntamente de forma irregular.
De esta manera, la Agencia Tributaria también extenderá su investigación a otras empresas con el objetivo de averiguar si el uso de estas tarjetas se ha generalizado. También va a llevar a cabo un procedimiento inspector sobre el uso que estos 86 directivos realizaron de las tarjetas, así como la procedencia de las partidas que manejaban.
En este sentido, se trata por tanto de investigar no solo las responsabilidades tributarias de Caja Madrid como entidad financiera, sino también de aquellas personas físicas que se aprovecharon de estos ingresos presuntamente ocultos al fisco. Entre ellas están algunas personas como Miguel Blesa, un expresidente de la Agencia Tributaria, Estanislao Rodríguez Ponga o incluso el exministro de Economía y Hacienda Rodrigo Rato.
Fue el viernes cuando Hacienda ya adelantó que lanzaría un plan de inspección centrado en las empresas del Ibex 35, como informó Hechos de Hoy, para conocer si dichas empresas utilizan tarjetas de crédito en b, tras el escándalo surgido entre los directivos de Caja Madrid, que gastaron más de 15 millones de euros entre 2003 y 2012 a través de estas tarjetas ocultas al fisco.
Asimismo, el Ministerio de Economía trata de averiguar si estas compañías realizan gastos a través de economía sumergida y de partidas no declaradas a Hacienda, algo que no tiene nada que ver, según Hacienda, con las tarjetas de representación que pueden manejar directivos pero cuyos gastos están justificados y declarados como rentas en especie o como gastos de representación.
"Se trata de averiguar si lo que presuntamente ha sucedido en Caja Madrid se ha generalizado en las grandes empresas, especialmente las del Ibex 35", comentaron fuentes de Hacienda que explicaron que este plan de inspección no se ceñirá únicamente a las empresas del Ibex 35, sino que se ampliará al resto de grandes compañías.