Los ingredientes
– 500 gramos de pasta fresca
– 1 cebolla
– 500 gramos de espinacas
– 250 gramos de gambas congeladas peladas
– medio vasito de vino blanco seco
– un brik de nata liquida
– un poco de guindilla
– aceite de oliva
– sal y pimienta negra recién molida
– unas almendras tostadas (opcional)
La preparación
Cortar la cebolla muy fina y pochar en un poco de aceite. Añadir un poco de guindilla si le gusta el picante.
Añadir las espinacas bien escurridas y cocidas previamente en agua y sal.
Remover y dejar que se haga a fuego vivo durante unos 5 minutos.
Agregar las gambas, saltear y regar con el vino. Dejar que se evapore un poco y añadir finalmente la nata y un poco de sal y pimienta. Dejar que espese.
Cocer la pasta fresca al dente. Escurrir. Mezclar la pasta con la salsa y servir bien calentito.
Como toque extra se pueden añadir unas gotitas de aceite de oliva virgen extra y unas almendras recién tostadas en una sartén antiadherente sin aceite.
