Toda la atención política y económica, en la escena de España, sobre las cruciales elecciones en el País Vasco, Máxima atención a que Bildu se ve ganador y pide abiertamente al PNV lo que califica como un gobierno abertzale. Alberto Núñez Feijóo ha destacado -como informó Hechos de Hoy– sobre la trascendencia de esta campaña y estas elecciones.

En Bilbao, en el arranque de la campaña, Cuca Gamarra ha defendido la Euskadi “abierta y plural” que representa el Partido Popular del País Vasco frente a la “sociedad de socorros mutuos” formada por PNV, PSE y Bildu.

“Aunque ahora hagan como que no se conocen, son socios antes de la convocatoria electoral y serán socios después, salvo que los vascos voten al PP y a Javier de Andrés para cambiar las cosas”, señaló la secretaria general del PP

Criticó al PNV, Bildu y PSE de ser “tres marcas intercambiables” por representar “el mismo proyecto” y haber formado una “sociedad de socorros mutuos”.

“Ya no engañan a nadie. Forman el mismo bloque y se apoyan los unos a los otros para mantenerse todos en el poder”, afirmó Cuca Gamarra, recordando que el PNV y Bildu han mantenido a Sánchez en La Moncloa; el PSOE ha mantenido al PNV en Ajuria Enea; y PSOE y PNV han dado a Bildu la ciudad de Pamplona.

Tachó de “vergonzante” la operación política que dio a Bildu el Ayuntamiento de Pamplona y criticó que el PSOE haya “blanqueado” al partido de Otegi durante los últimos años mientras ha “expulsado de sus filas” a socialistas históricos.

Se mostró de acuerdo con el candidato del PSE cuando dice que los integrantes de Bildu “son los mismos lobos con piel de cordero”. Pero reprochó que “quien le ha entregado la piel de cordero es el Partido Socialista”.

Ve al PNV “nervioso” y dando “bandazos” porque “sabe que han hecho las cosas mal” en el Gobierno vasco. Pidió apoyo a Javier de Andrés en las elecciones para parar al “nacionalismo asfixiante”.

Señaló la pérdida de peso económico, el deterioro de la Sanidad vasca y la caída en los informes PISA para pedir el voto al Partido Popular , que posibilite cambiar la situación hacia “un futuro mejor” para Euskadi.

Defendió el “cambio a mejor” que simboliza el Partido Popular de Javier de Andrés, al que sitúa como “columna vertebral del constitucionalismo” en Euskadi y la única alternativa “constitucionalista, de prosperidad y de la dignidad”.

Apostó por el “bilingüismo cordial” y “sin exclusiones” que promueve el Partido Popular. Y reivindicó la “agenda política útil” para los ciudadanos, frente a la “política útil para ellos mismos” del resto de partidos, a los que acusa de solo estar preocupados por su “reparto de poder”.

Defendió un País Vasco “abierto y moderado” con un Partido Popular “decisivo”. Contrapuso el modelo de “sociedad abierta, libre y próspera” que promueve Javier de Andrés con el “modelo cerrado” del nacionalismo.

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