Las tres causales de un aeropuerto.

Los proyectos que requieren trámites para ser aprobados por un gobierno, lo serán -a veces- cuando cumplan las exigencias de lugar o lo serán -incluso sin cumplirlas- cuando cuenten con el beneplácito de dicho gobierno. En ese último caso serán, inevitablemente, hijos ilegítimos o bastardos de éste: así será su reputación y con frecuencia también su validez.

Un puñado de “empresarios y funcionarios” de Danilo Medina concibieron el aeropuerto de Cap Cana, a solo 20 kms. del Aeropuerto Internacional de Punta Cana, como una aventura y como una venganza. Sabían que Punta Cana maneja el grueso del tráfico turístico del país -y que además de bien manejado es muy rentable. Pero sabían -también- que sus dueños no estaban en la gracia del Sr. Medina.

Querían una tajada de ese negocio y, a lo bestia, empezaron a tramitar la construcción de un nuevo aeropuerto, justo al lado del otro. 

El proyecto Aeropuerto Internacional de Cap Cana colapsó desde el mismo instante en que Danilo Medina no pudo garantizar su continuidad en el poder, ni a nombre propio ni con el Penco.

Por eso, tan pronto se supo que el candidato de Danilo Medina había perdido las  elecciones, aceleraron los trámites para dejar la aprobación del aeropuerto como un hecho consumado a base de ilícitos, irregularidades, vacíos, vicios y falsedades validando inspecciones no realizadas y concediendo permisos al vapor.

Partiendo de la evidencia acumulada en abundancia, el Tribunal Superior Administrativo (TSA) a través de sentencia emitida por unanimidad dictaminó que es lesivo para el interés general el permiso que otorgó el Instituto Dominicano de Aviación Civil (IDAC) el 11 de agosto del 2020 para la construcción de un aeropuerto internacional en Cap Cana, y por vía de consecuencia revocó la autorización para el inicio de la obra.

La acción del IDAC contra la comunicación  2293 del 11 de agosto del 2020 fue recurrida por los dueños del proyectado aeropuerto y conocida por el tribunal de alzada que emitió la decisión de lesividad de dicho aeropuerto.

Esta sentencia del TSA, la mas alta instancia de lo contencioso administrativo en el país, fue evacuada apenas la semana pasada y coincide desde el punto de vista lógico y operacional con el razonamiento de la IATA y del sentido común a saber: ese aeropuerto ni ha hecho, ni hace ni hará falta.

La International Air Transport Association (IATA) la entidad mundial de mas prestigio y credibilidad de la industria aérea en una comunicación dirigida al actual Ministro de Obras Públicas Deligne Ascensión y publicada en la prensa internacional afirma que no existe justificación razonable para la construcción de un nuevo aeropuerto en la zona de Cap Cana, tal y como había indicado yo mismo en artículo publicado en agosto del año pasado bajo el título: COMPLOT DEVELADO: Anatomía de una atrocidad.    

El conjunto de irregularidades e ilícitos en las ultimas semanas del reinado de Danilo Medina para favorecer al grupo ABRISA  “legalizando” aquel asalto a la legalidad mereció el repudio de grupos y federaciones ambientalistas desde el principio. 

Motivos inconfesables abundan y forman parte de los antecedentes de los promotores, cuya gestión ha sido -y es- tema de litigio en tribunales además de haber sido abordado en dos libros de reciente publicación: NEGOCIOS DE BAJO VUELO  de la autoría de Miguel Angel Ordoñez e HISTORIA DE UNA INFAMIA (Los Hazoury, la justicia y yo), del ex ministro de Turismo dominicano Victor Cabral.

La cuestión decía, no es tanto, discutir distancias, monto invertido ni pretender que las inspecciones y los permisos fueron otorgados en base a “mérito”, ya que ese proyecto nunca tuvo otra lógica que no fuera la del saqueo, la ilegalidad y la prevaricación, auspiciados por Danilo Medina.  Ese  Aeropuerto de Cap Cana es un proyecto, como muchos otros, ilegal, bastardo y fraudulento en su concepción, en su nacimiento y en su bautizo y no merece otra suerte que la que está teniendo: acción  judicial y la eutanasia. 
 

( *) Este artículo de Melvin Mañón ha sido publicado originalmente en el nativo digital www.rescatedemocratico.com.