Angela Merkel habló a fondo a Bettina Schausten, de la cadena ZDF -la influyente emisora publica de televisión de Alemania, más que la ARD-, sobre el momento político y económico de la Unión Europea. Fue una reflexión política y económica de la canciller.

Atrás han quedado los momentos tormentosos. Quienes apuntaron que la crisis de Grecia reforzaría y no debilitaría a la Eurozona hicieron el análisis correcto. Grecia sigue siendo un escenario de desafíos, pero es más una crisis local que continental.

La canciller lo explicó y razonó. Se mostró a favor de ayudas adicionales a Grecia para reducir la deuda pero reiteró su rechazo a una quita. Afirmó además que todavía hay margen en lo que respecta a los tipos de interés y los plazos de vencimiento de los créditos concedidos.

El tercer rescate de Grecia es sometido el próximo miércoles en el Bundestag a la ratificación de sus diputados en una sesión extraordinaria. El martes lo es también en el Congreso de los Diputados. Mariano Rajoy quiso el mismo rigor para España y es un debate importante en un agosto de intensidad política.

Angela Merkel volvió a mirar sobre los días tormentosos y la madrugada más larga de la Unión Europea y la Eurozona. Negó que surgiera una crisis con su ministro de Finanzas. Por el contrario destacó su activo papel para llegar a una solución. Dijo que estuvo en contacto permanente con Wolfgang Schäuble durante la última noche de las negociaciones.

Sobre los desafíos actuales, insistió en la importancia del gran flujo de solicitantes de asilo. Es un asunto que le preocupa como desafío político y moral. Lo ha tratado con Francisco (asunto destacado por Hechos de Hoy) y cree que incumbre a toda la Unión Europea. Asegura que es un asunto por encima de la estabilidad del euro, y del problema de Grecia, que mide a la Unión Europea en todo el mundo.