Un nuevo gesto de desprecio de Pedro Sánchez a los ciudadanos, las críticas, y la opinión pública en general mostrando que no tiene ninguna intención de reflexión y autocrítica sobre sus actos.
De nuevo utilizó el avión Falcon 900 del Ejército del Aire (T-18) -destinado a usos oficiales y no privados o partidistas- para asistir a un mitin de la campaña del PSOE en Andalucía en Málaga.
De Sevilla a Málaga son alrededor de 200 kilómetros por carretera, menos de dos horas en coche. Con opción de AVE en un trayecto de una hora y cincuenta y cinco minutos y varios trenes disponibles a lo largo de la mañana.
Pese a todas esas opciones, el primer ministro utilizó el Falcon para un vuelo de apenas 25 minutos.
En los datos del CIS de Tezanos, en estos momentos Pedro Sánchez cuenta con ganar los ayuntamientos de Sevilla y Málaga. Ha concentrado además todos sus esfuerzo en derrotar a José Luis Martínez-Almeida en Madrid. Y espera dar un golpe de mano en la Comunidad de Madrid para formar gobierno con el apoyo de Vox y derrotar a Isabel Díaz Ayuso. La presidenta es objetivo político de caza mayor.
Por todas estas razones quiso Sánchez estar en un mitin del PSOE en Málaga y desde ahí lanzar su mensaje de apoyo y solidaridad con la marcha política de Madrid contra Isabel Díaz Ayuso.
Como es habitual cuando viaja a actos del PSOE en el avión oficial, Sánchez utiliza la cortada -en gesto hipócrita y de desprecio a la opinión pública- de visitar una empresa pese a ser festivo para que figure como actividad de su agenda institucional.