Los ingredientes

– 1 pimiento rojo
– 1 pimiento verde
– 1 pimiento amarillo
– 2 cucharadas de zumo de limón
– 1 diente de ajo
– 6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
– sal gorda y pimienta negra

La preparación

Asar los pimientos en el horno a fuego medio (180ºC) con un chorrito de aceite y sal hasta que estén tiernos.

Dejar enfriar en la misma fuente en la que se han asado tapados con un papel de aluminio o un trapo. Una vez fríos, los pimientos habrán sudado y será mucho más fácil pelarlos.

Pelar los pimientos y despepitarlos. Cortarlos en tiras y reservarlos con un poco de líquido de la cocción.

Majar el ajo muy, muy bien en un mortero (si es pequeño, mejor dos) o exprimirlo y echarlo en un bol. Añadir el zumo de limón, un poco del líquido de cocción y el aceite de oliva. Reservar.

Colocar las tiras de pimiento en una fuente. Echar por encima un poco de sal gorda y pimienta negra.

Regar con el líquido y dejar al menos durante una hora en la marinada.