La mayor parte de los rebeldes atrincherados desde hace tres meses en Slaviansk (Sloviansk), el símbolo de la sublevación prorrusa contra Kiev, abandonaron la ciudad que el viernes quedó cercada por las fuerzas ucranianas. Lo confirmó el ministro de Interior de Ucrania, Arsén Avákov.

"Inteligencia comunica que Guirkin (más conocido como Igor Strelkov, jefe de las milicias de la ciudad) y la mayor parte de sus guerrilleros han huido de Slaviansk (Sloviansk), sembrando pánico entre los pocos que han quedado", escribió Avákov en su cuenta de Facebook. La autoproclamada República Popular de Donetsk confirmó a medios rusos la rendición de la ciudad y el traslado de los milicianos a Kramatorsk, a unos 15 kilómetros al sur.

"El presidente ha ordenado al jefe de Estado Mayor izar la bandera estatal sobre el Ayuntamiento", señaló un comunicado de la oficina de Petró Poroshenko.

Los combates por Slaviansk (Sloviansk), el primer lugar del este de Ucrania donde los separatistas tomaron las armas para establecer su control total sobre toda una ciudad, no habían cesado en más de dos meses, ni siquiera durante el teórico alto de fuego unilateral decretado por Kiev, vigente entre los pasados 20 de junio y el 1 de julio..

A la vez se cierra el plazo acordado por Kiev, Moscú, París y Berlín para celebrar una nueva ronda de consultas entre el Gobierno y los separatistas que podría cristalizar en nuevo alto de fuego en el este de Ucrania. Poroshenko ofreció a los sublevados celebrar la ronda de consultas y quedó a la espera de las iniciativas del llamado grupo de contacto (Ucrania, Rusia, OSCE y los separatistas).

El presidente de Ucrania ha accedido a negociar con los rebeldes e incluso a declarar un cese de hostilidades duradero, al que ha puesto tres condiciones: su cumplimiento por los sublevados, la liberación de todos los prisiones y el establecimiento del control sobre la frontera ruso-ucraniana, con la cooperación de Rusia y bajo la vigilancia de la OSCE.

Poroshenko ya no exige a los separatistas la rendición total como única condición para poner fin a la operación militar lanzada por Kiev contra los insurgentes que actúan en las regiones de Donetsk y Lugansk, como sí hacía en su plan de paz presentado el pasado mes de junio. La nueva etapa que se abre en Ucrania, como apuntó Hechos de Hoy, mostrará si Vladimir Putin rectifica a la vez sus posiciones y establece un a nueva relación con Petró Poroshenko como presidente de Ucrania y a la vez hombre fuerte del país.