En Washington se vivió con alivio el fin del bloqueo político en España. En las capitales claves de la Zona euro también (París, Roma y Berlín).

Tras el mazazo de Brexit y la herida de Siria, que es un fracaso europeo, se aguardaba el desenlace de una crisis inédita que nadie sospechó. En Bruselas se espera ahora conocer el tono del segundo mandato de Mariano Rajoy y su margen de maniobra política y económica. Su declaración de intenciones este miércoles 26, tras aceptar el encargo del Rey, tiene quer mostrar cambios en su hoja de ruta.

El jueves 27 no logrará la mayoría absoluta. El sábado 29 obtendrá sin embargo la luz verde en la sesión de investidura en base a su pacto de 170 escaños.

De las reacciones, políticas y económicas, satisfacción para Barack Obama tras el fiasco vivido con David Cameron. Estados Unidos desea estabilidad política y económica para España. para el presidente hubiera sido una decepción personal ver de nuevo abierto el flanco sur de la Unión Europea a nuevas convulsiones en el momento del final de sus años en la Casa Blanca.

Barack Obama confía en una Unión Europea sin fisuras en el momento en que se está escribiendo el poder de la guerra suní radical de ISIS (Daesh) en Irak. Es el primero además en advertir de lo nocivo de los populismos tanto para Estados Unidos como para Europa

Imdudablemente cómo será el nuevo mandato de Mariano Rajoy es una incógnita. Se aguarda conocer a su equipo y el funcionamiento de un Gobierno en minoría en España que tendrá que encontrar espacios de diálogo. En cierta manera puede ser el retorno a los acuerdos y pactos con los que se cimentó la Transición.

Aunque se tenga la impresión (que no es cierta) de prioridades económicas en Bruselas, lo que se espera en la Comisión Europea es un Gobierno para abrir caminos de diálogo en la relación de España con Cataluña. Los embajadores de la Unión Europea en Madrid observan esta situación con delicadeza y atención. Desde un punto de vista económico y político, los analistas coinciden en que no puede producirse un callejón sin salida.

El IBEX 35 el martes 25 cerró con cautela pero a la vez indudable alivio al darse el carpetazo al capítulo de nuevos comicios. Terminó en rojo con -0,83% y 9.139,7 puntos; prima de riesgo en 105; y bono a 10 años en 1,09%.