Nuevos tratamientos contra el cáncer de mama aumentan las tasas de supervivencia en estos tumores y abren nuevas puertas de esperanza. Estos datos se mostraron durante el Congreso de la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO) y suponen un antes y un después en las nuevas terapias.

Con motivo de la tercera jornada del Congreso, también se conoció una encuesta sobre pacientes que dejan la quimioterapia por sus efectos secundarios, y una investigación sobre el cáncer de cuello de útero metastásico. En lo referente al cáncer de mama, ESMO ofreció grandes novedades.

Sobre todo gracias al tratamiento que aumenta un 40% la supervivencia de un tipo de cáncer de mama muy agresivo, HER2 positivo con metástasis, según recoge el estudio Cleopatra, presentado en el Congreso. Un total de 250 centros de 19 países, entre ellos nueve hospitales españoles participaron en este estudio.

Asimismo, un seguimiento a largo plazo, 50 meses, de este estudio, demostró los potentes beneficios del nuevo fármaco en este cáncer con metástasis, señalan sus autores, ya que la supervivencia global ha pasado de una media de 40,8 meses a 56,5, logrando 15,7 meses más de vida.

El tratamiento añade un nuevo principio activo, pertuzumab, al actual, con trastuzumab y quimioterapia. El cáncer de mama HER2 positivo representa entre el 15 y el 20 por ciento del total de este tipo de tumores. Fue en junio de este año cuando el Ministerio de Salud autorizó la financiación de este nuevo medicamento.

"La mejora de la supervivencia observada en el estudio Cleopatra de cerca de 16 meses no tiene precedentes en otros sobre cáncer de mama metastásico; los resultados son increíblemente útiles para los pacientes y sus familiares. "Estamos ante cifras de supervivencia prácticamente inéditas en la oncología en la enfermedad avanzada; hay patologías no oncológicas consideradas crónicas en las que la tasa de supervivencia se aproxima a lo que revela este estudio", comentaron sus autores.

Asimismo, una segunda investigación se centró en el cáncer de mama avanzado HER2 negativo, que supone el 80% de todos los casos. Una nueva forma de utilizar el tratamiento antiangiogénico bevacizumab (Avastin) aporta 15 meses más de vida a las pacientes con este tumor.

Los resultados ponen de manifiesto un mejor control de la enfermedad al triplicar la supervivencia libre de progresión, objetivo primario del estudio, pero también se ha observado una mejoría significativa en la supervivencia global. "Estamos ante un estudio muy relevante; es la primera vez en mucho tiempo que obtenemos un aumento de la supervivencia de esta magnitud en los pacientes", subrayaron.

En lo referente al cáncer de cuello de útero con metástasis, un ensayo constató que añadir el fármaco experimental cedinarib a la quimioterapia reduce el tamaño del tumor y aporta una mejoría moderada a la supervivencia. "Este estudio ha abierto una nueva línea de investigación para un tipo de cáncer difícil de tratar", comentaron.

Por último, una encuesta europea realizada entre casi 8.000 pacientes de cáncer de Francia, Alemania, Italia, Reino Unido y España, recoge que el 7% interrumpen su tratamiento por los efectos secundarios. El 22% que lo dejaban tenían cáncer de mama, el 14% colorrectal y el 13% de pulmón.