Llegar a ingerir un aguacate al día puede ser totalmente saludable para mantener el colesterol malo por los suelos. Así al menos lo asegura una investigación que se publica en Journal of the American Heart Association, en la que se asegura que seguir una dieta moderada en grasa, en la que se incluyan los aguacates, puede ayudar a mejorar los niveles de colesterol malo en las personas con sobrepeso y obesidad.
Según los expertos de la Universidad Estatal de Pensilvania se trata de sustituir los ácidos grasos saturados, presentes en muchas dietas, por los insaturados de los aguacates. Asimismo también comentan que muchas dietas saludables para el corazón recomiendan sustituir los ácidos grasos saturados por ácidos grasos monoinsaturadas o poliinsaturados para reducir el riesgo de enfermedades del corazón.
Este hecho se da porque las grasas saturadas pueden aumentar los niveles de colesterol malo y elevar el riesgo de enfermedad cardiovascular. “Por ejemplo, la dieta mediterránea, que incluye frutas, verduras, cereales integrales, pescados grasos y alimentos ricos en ácidos grasos monoinsaturados, como el aceite de oliva extra virgen y frutos secos, al igual que los aguacates, no sólo contiene mejores grasas, sino también ciertos micronutrientes y componentes bioactivos que pueden desempeñar un papel importante en la reducción de riesgo de enfermedad cardiaca” comentan los expertos.
En el estudio en cuestión también se evaluaron los efectos de los aguacates sobre los factores de riesgo cardiovascular mediante la sustitución de los ácidos grasos saturados en la dieta estadounidense con ácidos grasos insaturados de los aguacates. Para ello, congregaron a un total de 45 pacientes sanos con sobrepeso u obesidad, entre 21 y 70 años.
Posteriormente, se les suministró una dieta baja en grasa sin aguacate, una dieta moderada en grasa sin aguacate, y una moderada en grasa con un aguacate diario. De esta forma comprobaron que el colesterol LDL era más bajo cuando se consumió la dieta con aguacate en comparación con los 8,3 mg/dl perdidos en la dieta moderada en grasas sin aguacate, o los 7,4 mg/dl en la dieta baja en grasa.
Por el contrario, los investigadores avisaron de que estos resultados no se pueden extrapolar a la población en general aunque sí aseguraron que pueden ayudar a favorecer el consumo de aguacates en una alimentación cardiosaludable.