El 2015 empezó como terminó el 2014 para la aviación: negro. Este miércoles los medios de comunicación abrieron sus webs con una noticia impactante. Un nuevo accidente aéreo que, otra vez, tuvo lugar en Asia. Un avión con 53 pasajeros de la compañía Transasia se ha estrellado en el río Keelung de Taipéi, la capital de Taiwán.

El aparato, un ATR 72 de hélices, cayó al agua cerca del viejo aeropuerto de Taipéi, que está en el centro de la ciudad, poco después de despegar hacia la isla de Kinmen, justo en la costa de China continental. Según las primeras informaciones, y tras publicarse varias grabaciones, su ala impactó por falta de altura contra un puente y hasta causó daños en un taxi que circulaba por la carrera.

El accidente ocurrió poco antes de las 11.00 horas locales (0.00 hora peninsular española). El piloto aún tuvo tiempo de avisar por radio a la torre de control de que se estaba produciendo una emergencia por un fallo en el suministro de combustible a uno de los motores cuando se precipitó sobre un puente elevado y acabó cayendo a las aguas del Keelung.

Según los últimos datos recogidos por las autoridades, al menos 25 personas habrían perdido la vida con el impacto, mientras una veintena continúan en paradero desconocidos. Los equipos de emergencia trasladaron a un número indeterminado de heridos a cuatro hospitales cercanos, mientras continúan las tareas para intentar encontrar a los desaparecidos, que podrían estar aún dentro del fuselaje.

Por el momento ya se han localizado las cajas negras del aparato, que se pondrán a disposición de la Comisión de Investigación sobre Seguridad Aérea taiwanesa. El avión había entrado en servicio apenas 10 meses atrás y había pasado su última revisión el 26 de enero. Había cubierto 1.624 horas de vuelo.

Se trata del segundo accidente que sufre esta aerolínea taiwanesa en menos de un año, después de que en julio del año pasado 48 personas murieran y diez resultaran heridas al estrellarse otro avión de idéntico modelo. En esa ocasión, el aparato se estrelló cuando intentaba realizar un aterrizaje de emergencia en las islas Pescadores por las malas condiciones atmosféricas debido al paso del tifón Matmo.