La mirada de Janet Yellen es sobre la Unión Europea y Asia. En la Zona euro hay incógnitas que no se ocultan sobre España, que se convirtió en la locomotora del crecimiento junto a Estados Unidos en 2015. 

La situación en España está abierta ahora con un gran interrogante sobre su su nuevo valor, que era el de  la estabilidad política en el sur de Europa. Hay además muchos flancos abiertos desde las elecciones generales del 20 de diciembre de 2015 con continuas sorpresas (ver en Hechos de Hoy, La investigación de blanqueo en el banco chino ICBC y la conexión de Irán y Podemos).

En Asia, República Popular China ha sometido a los mercados a continuas crisis. La Fed, el Sistema de Reserva Federal, el banco central de los Estados Unidos, constata que "la incertidumbre se ha incrementado". Las actas de la reunión de enero reflejan su preocupación sobre el crecimiento de la economía.

La Reserva Federal observa ahora la situación de Estados Unidos de forma más cauta. En enero no se movieron los tipos de interés. Ahora se siguen las nuevas turbulencias en los mercados financieros y el zigzag del precio del petróleo. "Las consecuencias de la situación en la economía doméstica no están claras, pero la incertidumbre y los riesgos han aumentado", sentenciaron los consejeros de la Fed.

Inicialmente la Reserva Federal situó el precio del dinero entre el 0,25% y el 0,5%. Estaba prevista una hoja de ruta de cuatro revisiones en 2016. Se mantiene el criterio de ajuste de la política monetaria. Pero ahora hay más atención a tres factores: la debilidad o fortaleza de la evolución de la economía; examen de los mercados financieros, especialmente con atención a Pekín-Tokio, y el caso español; y las perspectivas de crecimiento en general, con mirada a las economías emergentes, y la evolución de la inflación.