Atención porque analistas políticas están apuntando. según destacaron a Hechos de Hoy, a que ya hay respuestas para algunas de las preguntas que el Gobierno se niega a responder sobre los escándalos de corrupción y blanqueo.
Sin duda Vienen meses complicados para el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y para el PSOE. La investigación que tiene abierta la UCO en el llamado caso Ábalos, y en las subtramas que de éste se derivan, va a marcar intensamente la agenda política hasta Navidad (con continuidad en 2025).
Doble varapalo
El vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local y Análisis Electoral del PP, Elías Bendodo, explica que Sánchez sufrió “un doble varapalo” del TSJ. Primero, por apropiación indebida de la Abogacía del Estado, al usarla como bufete de defensa de su familia; y, segundo, por hacer “el ridículo” porque el tribunal le recordó que “pisotea” la separación de poderes.
Insistió a Sánchez en que “no puede arrastrar con él el crédito de instituciones tan importantes como la Fiscalía General y la Abogacía del Estado”. “Nunca antes en democracia había estado imputado el Fiscal General del Estado y, nunca antes un Gobierno, con su presidente a la cabeza, había salido en tromba a desautorizar al Tribunal Supremo para defender a un fiscal general imputado”.
Recordó que Sánchez presumía de mandar en la Fiscalía y lanzó una pregunta. “¿Qué sabrá el fiscal general del Estado para que Sánchez lo defienda a capa y espada aunque esté imputado y pese a que está arrastrando con él el descrédito de toda una institución fundamental de nuestra democracia?”
Insistió en que “no hay precedentes” ni en España ni en Europa, de un escándalo de tal dimensión: que una organización criminal le comprara un chalet de medio millón de euros a un ministro; que le pagara el alquiler a la amante de pago; que el presidente del Gobierno -el número 1- diga “bie”” a un viaje ilegal con el trasfondo de un negocio de 104 lingotes de oro valorados en 68 millones de euros.
Recordó que Sánchez “no solo lo sabía todo, sino que convirtió el ministerio de su número 2, de su mano derecha en el PSOE, en la gran fontanería de todo un Gobierno”. “Esto es lo realmente inquietante, por eso Transportes igual arreglaba un vuelo ilegal que el rescate de empresas”.
Destacó que miembros de la trama tenían un chat llamado “fontanería”. “¡Es que Aldama era un fontanero más al servicio de Pedro Sánchez!: Ábalos, Koldo y Aldama eran los fontaneros en jefe, al servicio de Pedro Sánchez“.
“Esto sería suficiente en cualquier país para que el presidente disolviera las Cámaras y convocara elecciones”.
Sostuvo que ya se sabe que la jefa de la banda era Delcy Rodríguez y el jefe Ábalos, pero lo “más grave” es que el “número 1 de la band”” era Pedro Sánchez que “estaba al tanto de todo”. “Igual que en su día en Andalucía. Desde las más altas esferas estaban al tanto de todo, aunque decían que era cosa de cuatro golfos”.
Criticó al Gobierno el trato que sirve a los Ayuntamientos “a los que debe más de 3.000 millones de euros por las pérdidas de la plusvalía y por el fondo COVID-19 del transporte urbano de 2021 que jamás llegó”. Y apuntó que de todos los consistorios hay doscientos que tienen serias dificultades financieras. “Tenemos un gobierno más independentista que municipalista”.
Criticó la nueva e “injusta” tasa de basuras que va a endosar el Gobierno de España a los Ayuntamientos y lamentó que tampoco se sabe nada de la Comisión Nacional de la Administración Local que iba a convocar el ministro.