El Atlético de Madrid ha anunciado este viernes la modificación de su escudo, "fiel a los colores históricos de la entidad, rojo, blanco y azul, más redondeado y con el oso y el madroño más visibles", unos cambios que pretenden "dotar de más "modernidad" al emblema colchonero.
Así, recupera la curva del escudo original, la del primer Atlético de Madrid, dotando de "esencia" y de "modernidad" al diseño de uno de los emblemas más reconocibles del club.
Según el gerente del club, Clemente Villaverde, se ha decidido prescindir de "elementos como algunos colores", caso del marrón y del verde, y convertirlo en algo "más original" y fiel al primer escudo, "limpio" y capaz de transmitir "lo que es el Atlético de Madrid".
Además, se regresa a los colores históricos del club, rojo, blanco y azul, que hacen que se haya "modernizado visualmente". Por otra parte, el oso del escudo es ahora más grande, lo que representa "más Madrid". "Es una apuesta del club por Madrid", zanjó.
Por otra parte, el Estadio Olímpico de Madrid, popularmente conocido como La Peineta y sede del Atlético de Madrid a partir de la temporada 2017-18, pasará a llamarse Wanda Metropolitano desde la próxima campaña, según ha confirmado el presidente del club, Enrique Cerezo.
El grupo empresarial chino Dalian Wanda Group, propiedad del magnate Wang Jianlin, se convirtió en accionista del club madrileño en enero de 2015, después de hacerse con el 20 por ciento del capital social de la entidad.
Desde la temporada 2017-18, el estadio situado en el distrito madrileño de San Blas-Canillejas, con capacidad para unos 67.000 espectadores, sustituirá al histórico Vicente Calderón, inaugurado en 1966 y que a su vez relevó al Estadio Metropolitano. Con el cambio, la entidad rojiblanca ganará más de 10.000 asientos.