“Es un sueño, siempre lo ha sido hacer un buen resultado aquí. Es un torneo tan bonito, es un sueño jugar unas semifinales en Wimbledon. No esperaba estar a un nivel tan alto en esta superficie. Es una locura”, afirmó un eufórico Carlos Alcaraz a pie de pista tras clasificarse para semifinales.
“Estaba muy nervioso al jugar unos cuartos de final en Wimbledon. Jugar contra Rune, de mi edad, es difícil. Lo he dicho muchas veces, cuando saltas a la cancha no hay amigos. Tienes que estar concentrado y lo he hecho”, añadió el tenista español tras ganar por 7-6(3), 6-4 y 6-4 al danés Holger Rune.
En la Pista Central del All England Lawn Tennis & Croquet Club, Alcaraz se llevó un partido de quilates y descaro entre dos abanderados de su generación. Tanto Carlos como Holger ya dejaron atrás su buen estatus en la Next Gen de la ATP y, en esta ocasión, luchaban por dar otro paso de gigante en sus respectivas trayectorias.
La próxima cita de Alcaraz es con el ruso Daniil Medvedev, que venció en cinco sets al estadounidense Christopher Eubanks, que pudo haber dado la sorpresa. Será el próximo viernes cuando el español y el ruso salten a la pista central en busca de un billete para la final.
Los otros dos semifinalistas son el serbio Novak Djokovic que se enfrentará también el viernes al italiano Jannik Sinner.
