Una gran repercusión en América Latina del triunfo en Ecuador de Guillermo Lasso, el exbanquero que impidió el regreso del correísmo al poder. El candidato por el movimiento Creando Oportunidades (CREO) será el sucesor de Lenín Moreno tras vencer en las elecciones a Andrés Arauz.

Em la tercera ocasión lo logró. Guillermo Lasso perdió los comicios de  2013 y 2017, frente a Rafael Correa y Lenín Moreno. Con el 19,74% de los votos, llegó con lo justo al ballotage de este domingo. Aquel 7 de febrero le sacó apenas 33.000 votos al líder indígena Yaku Pérez (19,39%), anticorreísta, pero de izquierda. Arauz fue quien ganó esa primera vuelta con el 32,72%.

Guillermo Lasso sabía bien lo crucial de esta elección. Fue muy importante su llamada a la unidad en tiempos de la COVID-19 y su rechazo al odio.

"Venimos de 14 años de dos Gobiernos que se dedicaron a enfrentar a los ecuatorianos, y no existe nada peor que el odio y la venganza. Por ello, necesitamos estar unidos; y, con el apoyo de todos, saldremos adelante de esta crisis", dijo en su llamamiento desde Guayaquil.

"Ante la diversidad caben dos actitudes. La del Gobierno, que durante más de una década persiguió a todos los que no se ajustaban a los gustos de un caudillo (alusión directa a Correa), y, la nuestra, que considera que la diversidad es uno de los mayores capitales con los que contamos", subrayó.

Guillermo Lasso. a favor del libre comercio, subrayó en la campaña la importancia de que Ecuador "forme parte de la Alianza del Pacífico, de la manera más urgente posible".

Ante la pandemia de coronavirus, ha propuesto vacunar a nueve millones de personas en sus primeros 100 días de gobierno. Habrá "un cambio de modelo que de vuelta a la página al pasado de corrupción, de ineficiencia y de despilfarro de los recursos públicos", insistió.

Guillermo Lasso defiende incentivos tributarios, créditos a 1% de interés y un ajuste progresivo del salario mínimo hasta llegar a los 500 dólares. También plantea crear dos millones de empleos y construir 200.000 viviendas rurales.

Al votar, en su último memnsaje, prometió "un Ecuador de oportunidades, un Ecuador libre, donde todas las familias ecuatorianas puedan alcanzar la prosperidad·.

Anunció que promoverá un país donde "toda mujer se sienta protegida, respetada, cuidada, donde todos los miembros de la comunidad LGBTI sientan la protección y el respeto para que nunca más sean estigmatizados, discriminados y tengan las mismas oportunidades de desarrollo profesional y académico que cualquier otro ecuatoriano".

El líder del movimiento CREO, que se presentó en alianza con el Partido Socialcristiano (PSC), subrayó la protección a las madres solteras, a las adolescentes embarazadas, y el apoyo al sector agrícola y ganadero.

Aunque lleva fuera de Ecuador en los últimos cuatro años, Rafael Correa fue una de las figuras centrales de la contienda electoral. El expresidente, afincado en Bélgica con su familia tras concluir su mandato (2007-2017), rompió con Moreno apenas éste se instaló en el poder, desatándose una feroz disputa que fraccionó a la izquierda. Una victoria de Arauz hubiera supuesto la vuelta del correísmo.

Guillermo Lasso encarna a la derecha tradicional, empresarios, algunos medios de comunicación y parte de los desencantados con Rafael Correa. Nació en Guayaquil, donde se vinculó desde muy joven a la Bolsa de Valores para costearse sus estudios secundarios en un colegio católico. 

Aunque no completó sus estudios en Economía, logró sobresalir en el sector financiero, donde ocupó la presidencia ejecutiva del Banco de Guayaquil, uno de los principales del país. En 2012 se retiró de la banca para fundar el movimiento Creando Oportunidades (CREO), emergiendo como el mayor opositor al ex presidente Correa.

La izquierda siempre lle recriminó por su pasado de banquero en un país que sufrió a finales de los 90 el colapso del sistema financiero, a raíz de un esquema fraudulento de préstamos. Cientos de miles de ecuatorianos migraron y el país adoptó el dólar como moneda en 2000.

Miembro del Opus Dei, en 2013 se fracturó el peroné derecho en una peregrinación religiosa. A raíz de la lesión, usa bastón.
Lasso es el último de once hijos de un matrimonio de clase media. Está casado con María de Lourdes Alcívar y tiene cinco hijos.

Ha sido gobernador de la provincia de Guayas, cuya capital es Guayaquil, y ministro de Economía en el gobierno del derrocado ex presidente Jamil Mahuad (1998-2000).

"Este es un día histórico, un día en que todos los ecuatorianos han decidido su futuro, han expresado con su voto la necesidad de cambio y el deseo de mejores días para todos", dijo Guillermo Lasso desde Guayaquil al confirmarse su victoria,

Sus agradecimientos a Dios, su familia, y muy especialmente a Alfredo Borrero, su compañero de candidatura, "hoy vicepresidente electo de Ecuador". Palabras de agradecimiento también para Jaime Nebot, líder del Partido Socialcristiano, que lo apoyó en estas elecciones presidenciales.

Ha sido una remontada espectacular tras perder en la elección del 7 de febrero cuando obtuvo el 19,74% de los apoyos y casi se queda fuera del ballotage.

El primero en felicitar a Guillermo Lasso entre los líderes de América Latina fue el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou. "Acabo de hablar con él para felicitarlo por su triunfo y para ponernos a trabajar en conjunto en los temas que tengamos en común nuestros países".

También el presidente de Colombia, Iván Duque. "Felicitamos a Guillermo por su elección como Presidente de Ecuador. Hace unos minutos dialogamos y hablamos de trabajar juntos por la región; Continuaremos fortaleciendo nuestras relaciones comerciales, de seguridad e integración andina para beneficio de nuestros países".

El presidente de Chile, Sebastián Piñera, le felicitó por su triunfo. "Felicitaciones y suerte Guillermo, quien es un buen amigo personal y un gran amigo de Chile".

También le quso felicitar Juan Guaidó.

"Felicitaciones a Ecuador por la jornada electoral de hoy, y al Presidente electo Guillermo Lasso por su triunfo. Contamos con su apoyo a la lucha venezolana. Es vital la unión de quienes queremos libertad y democracia para la región, amenazada por dictaduras como la de Maduro".

Sin duda ha sido un revés Un inimaginable para el elegido por el ex presidente Rafael Correa para regresar por la puerta grande desde su exilio. Guillermo Lasso protagonizó una remontada histórica en Ecuador, que le lleva de forma sorprendente hasta el Palacio presidencial de Carondelet, que ya rozó en 2017 tras caer derrotado por algo más de 2 puntos frente a Lenín Moreno. Ahora el exbanquero conservador se ha proclamado presidente electo de Ecuador sobre el delfín de la izquierda correísta.

Ha pesado en este desenlace el hartazgo en el país ante los abusos y la corrupción de la revolución ciudadana. Afloró el anticorreísmo militante. Y no se produjo el voto oculto que esperaba la Unión para la Esperanza (UNES). Resultó también relevante la decisión de Lenín Moreno de no entrar en la campaña.

Para los analistas de marketing político, logró más de 30 puntos en esta segunda vuelta, unas cifras casi inéditas en América Latina.

Al acabar la primera vuelta era un hombre vencido y vapuleado. Tanto en lo político como en su salud. 

Pero de repente ensanchó su espacio político y personal, más allá de sus convicciones personales e íntimas. Logró así los apoyos de Xavier Hervás, el candidato de Izquierda Democrática y de la compañera de fórmula política de Yaku Pérez.

Irrumpió con fuerza en las redes sociales para conseguir el voto joven. Comenzó a crecer al ritmo de Bad Boy de Michael Jackson y de sus zapatillas deportivas rojas, el símbolo de una campaña que recorrió de forma inteligente el territorio nacional. En el crítico debate de la campaña, acuño la frase de  "Andrés no mientas otra vez". Logró además, y fue el hito decisivo, el voto de la sierra central, el voto indígena.