El director de Relaciones Institucionales del Real Madrid, Emilio Butragueño, ha calificado de "sorprendente, lamentable y muy difícil de entender" lo ocurrido este lunes en el sorteo de los octavos de final de la Liga de Campeones.

Ha tenido que repetirse por un error en la introducción de las bolas correspondientes a los rivales del Atlético de Madrid.

"Ha sido sorprendente, lamentable y muy difícil de entender lo que ha ocurrido hoy, teniendo en cuenta que millones de aficionados estaban pendientes del sorteo, así como todo el mundo del deporte", expresó Emilio Butragueño a Real Madrid TV tras la celebración del segundo de los sorteos.

Los de Carlo Ancelotti, que en el primer sorteo habían quedado emparejados con un asequible Benfica, deberán afrontar su cruce con el Paris Saint-Germain, con el que jugarán la ida en el Parque de los Príncipes y la vuelta en el Santiago Bernabéu.

A pesar de todo, el dirigente madridista aseguró que vivirán "con ilusión" la eliminatoria ante el conjunto parisino.

"Afrontamos esta eliminatoria con toda la ilusión, conscientes de lo que significa esta competición para el club y nuestros aficionados y conscientes también de las dificultades, por el rival y la categoría de los jugadores que tiene, pero con la confianza de que el equipo hará dos grandes partidos, dos partidos que seguro que van a ser estupendos para el fútbol. Tenemos la esperanza de que podamos estar en el sorteo de cuartos", concluyó.

La polémica saltó cuando durante el primer sorteo, con el exfutbolista ruso Andréi Arshavin como mano inocente y después de que saliese la bola del Atlético de Madrid, el oficial de la UEFA Michael Heselschwerdt introdujo en el bombo al Liverpool, con el que los rojiblancos no podían cruzarse por haber estado juntos en el Grupo B, en lugar de al Manchester United.