Soraya Sáenz de Santamaría fue incisiva ante Susanna Griso en el plató de Espejo público, el programa de Antena 3. Subrayó que Cataluña no puede estar pendiente de los "caprichos" de Carles Puigdemont, quien considera que cuando percibe que pierde "cuota de pantalla, empieza a enredar".

La vicepresidenta examinó la situación después de la reunión en Bélgica del expresidente prófugo  con el grupo parlamentario de Junts per Catalunya (JxCat). Carles Puigdemont insistió en su apuesta por Jordi Sánchez para ser investido presidente de la Generalidad.

La vicepresidenta insistió en que Cataluña necesita "un candidato dentro de la ley y fuera de la cárcel". Consideró que el expresidente se resiste a retirarse del panorama político catalán porque "esto se ha convertido en su modo de vida".

Pero a la vez recalcó que Cataluña no es el modo de vida del expresidente prófugo, sino una comunidad de ocho millones de habitantes que ha asegurado que no tiene ningún problema con sus servicios públicos porque los está gestionando el Gobierno con la aplicación del artículo 155 de la Constitución.

Insistió en que no puede ser que Cataluña esté pendiente de los "caprichos" de Carles Puigdemont y le ha advertido de que "el único que pone y quita gobernantes en la Generalitat es el pueblo de Cataluña y el Parlament".

La vicepresidenta fue preguntada por los registros realizados este jueves por la Guardia Civil y en el marco de la investigación de los gastos por el 1-O en la sede de Òmnium Cultural en Barcelona y en el domicilio y el despacho de Antoni Molons, secretario de Difusión y Atención al Ciudadano de la Consejería de Presidencia.

Expresó su respeto a las decisiones judiciales y recordó que el Gobierno ha puesto a disposición judicial y del Tribunal de Cuentas facturas relacionadas con el servicio exterior de la Generalitat. "No puede usarse el dinero de todos para las aspiraciones políticas ilegales de unos pocos", sentenció.

El actual escenario

PDECat y ERC esperaban un resultado diferente de la reunión que celebró el grupo de Junts per Catalunya con Carles Puigdemont en Bélgica.

El expresidente prófugo no propuso un candidato diferente de Jordi Sànchez. Tampoco confirmó que él y Toni Comín vayan a dejar sus escaños para mantener la mayoría independentista en el Parlamento de Cataluña. Se negó a confirmar a Jordi Turull como alternativa a Jordi Sànchez.