En domingo político intenso, y días después del discurso de Mariano Rajoy que abrió la campaña del Partido Popular, Pedro Sánchez irrumpió plenamente en la escena política.
El mejor regalo que tuvo en día tan señalado estuvo en la encuesta de Metroscopia publicada por El País que le situó como el segundo líder más valorado detrás de Albert Rivera. En la misma encuesta, Mariano Rajoy con la mayor nota negativa. De nuevo una cuestión -la total falta de empatía- que como ha publicado Hechos de Hoy escuce al propio presidente y su mujer, Elvira Fernández, muy unida a él ante meses decisivos para el presidente del Gobierno y líder del PP.
Pedro Sánchez fue proclamado candidato a la presidencia del Gobierno en un comité federal en el que se presentó sin primarias al no tener competidor. Una vez proclamado, pronunció su primer discurso como aspirante a La Moncloa.
El líder socialista expuso ante 2.000 personas, en un teatro de Madrid, su primera declaración de intenciones como candidato y un mensaje para atraer a la mayoría y alejarse del rincón de los radicales donde el Partido Popular le quiere situar por sus pactos con Podemos. Pidió al presidente de Asturias, Javier Fernández, que fuera su presentador por ser considerado un referente para el partido y un ejemplo como gobernante,
Entre el público, los barones del PSOE; el exsecretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba; el expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; y el exvicepresidente, Alfonso Guerra. Felipe González, en la versión ofcial, no pudo acudir por motivos de agenda.