En su mensaje a la Nación, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, realizó una declaración en la que la palabra guerra no se citó ni una sola vez. Obama se dirigió por televisión a los estadounidenses para afirmar que "quien amenaza a un americano no estará seguro en ningún sitio del mundo" y enfatizó que las acciones emprendidas por el Estado Islámico (ISIS-IE) plantean una "amenaza" contra su país y que hay que estar en alerta porque "podrían llevar a cabo ataques mortales", enfatizó.
A las nueve en punto de la noche, hora local (las 3 de la madrugada en España) Obama comenzó su discurso ante las cámaras instaladas en la Casa Blanca. Vestido de oscuro, con corbata roja y un pin con la bandera americana en la solapa, el presidente deja claro que ha llegado el momento de apelar al patriotismo y a la unidad. El presidente habló en el horario de máxima audiencia televisiva para explicar a sus compatriotas que esta campaña antiterrorista se llevará a cabo "con un esfuerzo firme y sin descanso para sacar al Estado Islámico de donde quiera que esté, utilizando nuestro poder aéreo y nuestro apoyo a las fuerzas aliadas sobre el terreno".
Pero Estados Unidos no actuará solo. “Esta noche, con un nuevo gobierno iraquí formado y tras consultar con aliados en el extranjero y con el Congreso, puedo anunciar que América liderará una amplia coalición para hacer retroceder esta amenaza terrorista”, declaró Obama.
El presidente, que se dirigió a sus compatriotas en vísperas del 13º aniversario de los ataques del 11-S, dio a conocer la los planes de su administración con el fin de frenar el avance de los yihadistas. Durante su discurso, Obama recordó que aviones estadounidenses han lanzado más de 150 ataques aéreos contra los milicianos. "EE. UU. va a encabezar una coalición amplia" para "destruir a ISIS", señaló. "Nuestro objetivo es claro. Degradaremos y, en última instancia, destruiremos al Estado Islámico a través de una estrategia antiterrorista integral y sostenida, trabajando con el nuevo Gobierno iraquí", anunció.
Obama insistió en que "perseguiré a los terroristas que amenazan a nuestro país. No vacilaré en tomar acciones contra ISIS en Siria, al igual que en Irak", a la vez que condenó al régimen de Bashar el-Asad y llamó a reforzar a la oposición en ese país. Obama hizo hincapié en que "ISIS no es islámico: ninguna religión acepta el asesinato de inocentes, y por supuesto que no es un Estado".
El presidente Obama también indicó que hablará ante la ONU para reforzar una coalición internacional contra los yihadistas, y anunció que mantendrá la ayuda humanitaria en favor de las comunidades perseguidas por el Estado Islámico.
Pero también recalcó que no desplegará tropas de combate en territorio extranjero.
Durante su mensaje serio y muy medido, Obama recordó que el ISIS ejecutó a dos periodistas estadounidenses que mantenía como rehenes, Jim Foley y Steven Sotloff. Dos muertes que han impactado al mundo.
Obama anunció el envío de 475 consejeros militares extras para prestar apoyo a las fuerzas iraquíes, en particular en tareas de entrenamiento para enfrentar al ISIS, al que tildó de "la mayor amenaza actual" que "ejecuta a sus rehenes mata a niños y decapitan de forma brutal a ciudadanos estadounidenses". De este modo justificó los ataques aéreos contra Estado Islámico y alertó de que cientos de sus miembros están en posesión de pasaportes europeos y pueden regresar a sus países para perpetrar atentados.
Petición al Congreso
El presidente también pidió al Congreso que le conceda "autorización y recursos adicionales para entrenar y equipar" a la oposición siria, alegando que ellos son el "mejor contrapeso" a los combatientes del ISIS que ya controlan enormes territorios en Irak y Siria. "En la lucha contra el ISIS, no podemos confiar en el régimen de Asad, que aterroriza a su propia población, un régimen que nunca recuperará la legitimidad" que perdió, dijo.
Sin embargo, en su tenso discurso de 14 minutos, insistió en que el nuevo frente de combate no repetirá las exhaustivas experiencias de guerra de la última década. "Quiero que el pueblo estadounidense entienda que este esfuerzo será diferente de las guerras en Irak y Afganistán", afirmó Obama. E insistió en que "no implicará a tropas estadounidenses luchando en territorio extranjero".
Según Obama, la nueva estrategia será más parecida a la utilizada por Estados Unidos en Yemen y en Somalia, apoyada en ataques aéreos puntuales y el uso generalizado de aviones no tripulados (drones).
"Acabaremos con los centros terroristas en cualquier lugar en el que aparezcan", es decir, tanto en Irak, como en Siria, dijo Obama en una promesa de realizar la lucha contra Estado Islámico sólo desde el aire, y en ningún caso, al contrario de la guerra de Bush en Irak, arriesgando la vida de soldados americanos en tierra. En todo momento, Obama habló del Counter Terrorism, palabra clave para ataques concretos de unidades especiales y servicios secretos.
Insistió también en su apoyo a los rebeldes sirios en su lucha contra ISIS para lo que formará una alianza con los estados árabes. También luchará contra el cáncer de ISIS evitando que llegue dinero a los terroristas desde Arabia Saudí, Kuwait o Catar.