Vacaciones de Barack Obama en la isla de Martha´s Vineyard, en el estado de Massachusetts, pendiente de los acontecimientos en Irak, y con parte de sus consejeros y asesores en cuestiones de seguridad.
Antes de abandonar la Casa Blanca desveló el apoyo de Francia y Reino Unido a la nueva intervención de Estados Unidos en Irak frente a la guerrilla suní radical de Estado Islámico (EI o Isis). François Hollande y David Cameron están dispuestos a cooperar en las acciones que sirvan para evitar una catástrofe humanitaria en Irak.
En Washington no se descarta -como sucedió en la crisis de las armas químicas en Siria– que pueda producirse un acercamiento entre Rusia y Estados Unidos, pese a la pugna de Ucrania, para una misión humanitaria en Irak. Preocupa sin embargo a los asesores de Barack Obama, y es el dossier explosivo en manos del presidente, que pueda producirse un chantaje en Irak.
La guerrilla suní radical tendría capacidad de devolver los ataques de la aviación de Estados Unidos con una acción destructiva. Segú informaciones de Hechos de Hoy, es el serio temor de los servicios de inteligencia que se habría comunicado al presidente por parte de sus asesores.
La guerrilla podría provocar un desastre total en Irak destruyendo la presa de Mosul, la más grande del país. Su destrucción desencadenaría inundaciones devastadoras en el valle del río Tigris, arrasar la ciudad de Mosul, y causar graves daños a la capital, Bagdad, a 350 kilómetros.
Las vacaciones finalizarán el 24 de agosto, pero el presidente viajará a Washington entre los días 17 y 19 para celebrar diversas reuniones en la Casa Blanca, y regresar luego a reunirse de nuevo con su familia. Barack Obama ha recibido varias críticas por abandonar la capital en medio de varias crisis internacionales, pero el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, ya insistió que, de necesitarlo, el vuelo de vuelta a Washington "es muy corto".
