La nadadora Mireia Belmonte será la gran atracción del LIX Campeonato de España de Gijón, que se celebra en la piscina de Santa Olaya desde este viernes y hasta el domingo, en lo que será su primera gran competición desde su ausencia en el Mundial de Kazán por culpa de su lesión en los hombros.
Mireia, que optó por no pasar por quirófano, no está recuperada al cien por cien, pero estaría cerca de encontrarse cerca de una buena versión. Belmonte, cuyo gran objetivo son los Juegos Olímpicos de Río, está inscrita en seis pruebas (400, 800, y 1.500 libre; 200 y 400 estilos y 200 mariposa), un programa exigente que servirá de termómetro a su estado de forma, el cual ya pudo testar en los 5km de Terrasa, donde compitió sin problemas.
La cita de Gijón, que se celebra en piscina de 25 metros, también supondrá la posibilidad de ver a Jessica Vall, bronce mundialista este verano en Rusia. La catalana, en ausencia de Mireia, trajo -con su bronce- el único metal para la delegación nacional a excepción de la natación sincronizada. Vall peleará por seguir siendo la reina nacional en braza.
Además, otras nadadoras como Melani Costa, la espaldista Duane da Rocha o Bea Gómez, reclamarán los focos en un campeonato que servirá para comprobar cómo están los nadadores a ocho-nueve meses de que comiencen los Juegos, la fecha marcada en rojo en sus calendarios.
En el programa masculino, Marc Sánchez, Ortiz-Cañavate o Hugo González serán tres de los nadadores a tener en cuenta apenas dos semanas antes del Open de Ámsterdam, un certamen de nivel donde tanto Mireia Belmonte como sus propios compañeros examinarán con mayor exactitud su nivel previo a Río.