El delantero argentino Lionel Messi regresa a Barcelona sin poder ser de la partida en el próximo encuentro de su selección frente a Venezuela, correspondiente a la fase de clasificación para el Mundial de Rusia de 2018, después de haber finalizado el choque de este jueves contra Uruguay con fuertes molestias en el pubis.
La Asociación del Fútbol Argentino (AFA) comunicó este viernes que la estrella albiceleste no viajará a Mérida para el duelo del próximo martes 6 de septiembre a causa de "un cuadro de dolor inguinocrural", del que no se apreciaron mejorías después de tratarle este mismo viernes un "tratamiento médico y kinésico" en la zona afectada.
Ante esta situación, se tomó la decisión de no arriesgar y de que el delantero abandone la concentración y regrese de inmediato a Barcelona. El jugador prefiere ser tratado por los servicios médicos del FC Barcelona, que le esperan con algo de preocupación dado que no saben el alcance de la lesión.
Messi, pese a acudir a la concentración con Argentina renqueante de su dolencia, disputó los 90 minutos frente al combinado charrúa siendo una pieza fundamental, marcando un solitario tanto que dio la primera victoria para su equipo a las órdenes de Edgardo Bauza, aunque terminó preocupado por su estado físico.
"Me duele mucho el pubis. Es un tema jodido y puede ir a peor. Siempre quiero estar, pero es verdad que se vienen muchos partidos importantes y la temporada recién empieza", avisó Messi a la conclusión del choque, percatando a los suyos de que su lesión podría ser más seria de lo previsto.
Tras el duelo ante Ururguay, Bauza ya se mostró poco optimista con la presencia del "10" en Venezuela. "Se tiene que empezar a tratar, es un tema delicado, hay que cuidarlo", explicó.