Hoy por hoy, Mariano Rajoy no contempla otra alternativa que la de resistir, seguir al frente del Partdo Popular (PP), y mantener su candidatura para unas terceras elecciones.
Ha sido su respuesta a quien defienden la Operación Cocodrilo, la que propugna que una de las claves de la solución pasa por el sacrifico y paso atrás de Mariano Rajoy para que el Partido Popular presente otro candidato. El no lo ve así. Fueron sus confidencias en el aeropuerto de Kazán, escala en su viaje a la República Popular China para asistir a la cumbre del Grupo de los Veinte (G-20).
Mariano Rajoy insiste en levantar su propio muro.
"Yo lo vi claro el primer día, miré el resultado, vi la distribución de la cámara y comprendí que la mejor solución y la más sensata era un gobierno de coalición con el PSOE y también con Ciudadanos y es lo que sigo pensando hoy", insiste.
Aesgura que su lectura de la crisis es la única válida. "La gran coalición es lo mejor, es lo que se lleva en Europa y serviría además para superar ese estigma casi histórico de que el PP y el PSOE no se pueden entender ni gobernar juntos en España", apuntó.
"No vamos a renunciar a formar gobierno por una razón muy sencilla y democrática: hemos ganado las elecciones" recalcó insistiendo en sus mensajes de resistencia. "No renuncio a gobernar y presentaré mi candidatura a las elecciones. Yo ya he hecho lo que tenía que hacer y lo que se me podía pedir, no tengo un plan b y no sé si me presentaré o no a otra investidura porque todavía no lo he pensado" sentenció en Kazán.
– Ver en Hechos de Hoy, Rivera acertó al pedir la solución de un paso atrás de Rajoy y Sánchez.