En el día del encuentro de Artur Mas y Pedro Sánchez en la sede de la Generalitat se produjo la reunión en La Moncloa del presidente del Gobierno con Rosa Díez. La líder de Unión Progreso y Democracia (UPyD) quiso llevar a Mariano Rajoy el mensaje de que no está sólo ante el pulso político de Artur Mas.

Analistas políticos vieron también en este encuentro una cierta contraprogramación a la visita de Pedro Sánchez a Barcelona -la rapidez de Rajoy al recibirla ante su petición- y los dilemas de UPyD por el avance de C´s Ciutadans (Ciudadanos – Partido de la Ciudadanía) de Albert Rivera y la irrupción de Podemos de Pablo Iglesias. El encuentro de Rosa Díez con Mariano Rajoy se produjo también en el marco del debate en UPyD donde hay presiones de Sosa Wagner para el pacto con Albert Rivera ante los comicios locales y la postura de Irene López que defiende lo contrario. Sin duda la hipótesis de comicios adelantados en Cataluña, las tensiones del caso Pujol y el horizonte electoral de mayo de 2015 de comicios locales pesa con fuerza.

En estos escenarios, la secretaria general del Partido Popular (PP), María Dolores de Cospedal, planteó formalmente en Badalona la oferta adelantada por la presidenta del partido en Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho, a Unió, PSC, UPyD, y C´s Ciutadans de un movimiento de centro no nacionalista en las próximas elecciones catalanas. Sobre esta tesis, Josep Antoni Duran i Lleida dijo que el Partido Popular "sigue sin entender nada", Miquel Iceta descartó "frentes" que "polaricen" la sociedad catalana y Albert Rivera vio inviable una coalición "con el partido de Bárcenas o el de los ERE".

En estas aguas agitadas, Mariano Rajoy instó a Artur Mas a no jugar a equívocos ante una consulta que no se celebrará. Afirmó que la pretensión de convocar una consulta en Cataluña es un asunto muy serio y que si la pretensión de Artur Mas siguiera adelante, provocaría "empobrecimiento". A su vez Artur Mas pidió al PP que escuche el "pulso del pueblo catalán". El presidente de la Generalitat insistió en que convocará la consulta de forma legal, amparado por la ley de consultas. 

En su llamamiento de Badalona, Cospedal advirtió que Convèrgencia i Unió (CiU) está en "un bucle muy peligroso" que le lleva a "robar derechos a los catalanes" y a su propia destrucción. "El comportamiento de Mas lleva al suicidio y a la nada. Al suicidio de su partido político y a la nada. Necesitamos estar fuertes y necesitamos estar unidos", dijo Cospedal aludiendo también fraude fiscal confesado por el expresidente de la Generalitat, Jordi Pujol.

Cospedal acusó a la vez a CiU de "engordar a Esquerra" y al independentismo. Fue dura en sus palabras. "El independentismo catalán quiere que todos seamos iguales, porque el que no piensa igual es enemigo de Cataluña. Eso no es ser un país. Eso es el totalitarismo, es la dictadura encubierta". dijo Cospedal. Dos notas a destacar por último. El deseo en el que persevera Pedro Sánchez de abrir un escenario de luces largas con el énfasis en la reforma constitucional, y la confirmación por el propio Felipe González -asunto que destacó Hechos de Hoy– de que medió entre Mariano Rajoy y Artur Mas para que volvieran a una senda de diálogo.