Los ingredientes
– 500 gramos de macarrones
– 2 o 3 latas de atún en aceite
– 1 brik o tarro pequeño de tomate frito
– un sobre de queso mozzarella rallado
– 1/2 pastilla de caldo de pescado o verdura
Para la bechamel
40 gramos de mantequilla.
50 gramos de harina.
1/2 litro de leche semidesnatada
La preparación
Cocer la pasta en abundante agua con sal hasta que esté al dente. Escurrir y reservar.
Preparar la bechamel calentando la mantequilla en un cazo a fuego medio. Cuando esté derretida, incorporar la harina y tostar un poco con mucho cuidado de que no se nos queme. Añadir la leche poco a poco sin dejar de remover para se vaya mezclando bien la harina con la leche y no queden grumos. Incorporar también la media pastilla de caldo desleída en un poquito de agua.
Añadir un poco más de leche o incluso agua si la bechamel queda demasiado espesa. Si está muy líquida, diluir una cucharada de Maizena en un poco de leche fría y añadir batiendo bien con las varillas.
Poner el tomate en el fondo de una fuente de horno tipo pyrex y colocar encima los macarrones. Cubrir con las dos latas de atún sin el aceite y bien desmigadas con un tenedor.
Verter por encima la bechamel recién retirada del fuego y espolvorear con el queso .
Meter al horno precalentado a 180º hasta que se gratine y se forme una costra en la superficie.
Servir como plato único y acompañado de una buena fuente de ensalada.