El “pico” con Jenni
“Quiero dar mi explicación sobre el pico, más que un beso, fue un pico. El deseo que podía tener dando ese beso era el mismo deseo que podría tener dándole un beso a mi hija, aquí no había dominio.”
“Fue espontáneo, mutuo y consentido. Fue consentido. Tengo una gran relación con todas las jugadoras y tuvimos momentos muy cariñosos en esta concentración. En el momento en el que apareció Jenni ella me levantó del suelo y al dejarme nos abrazamos y yo le dije olvídate del penalti, has estado fantástica en este Mundial y ella me dijo eres un crack, yo le dije ¿un piquito? y sucedió.”
“El comunicado no lo termino de entender. Aquí no se está tratando de hacer justicia, se está haciendo un asesinato social,” afirmó el presidente.
Rubiales pidió perdón por “agarrarse sus partes” en el palco, junto a la Reina Letizia, y explicó que fue un gesto de “ole tus huevos” dedicado a Jorge Vilda.
Habló de “falso feminismo” y se enfadó con políticos que le han criticado y anunció querellas contra ellos. También atacó a los medios de comunicación. Yolanda Díaz fue de las primeras personas en reaccionar en las redes sociales pidiendo medidas al Gobierno contra Rubiales.
Rubiales se queja de cinco años de “cacería”
El 17 de mayo de 2018, Rubiales fue elegido por amplia mayoría como nuevo presidente de la RFEF, ganando en las elecciones a su oponente Juan Luis Larrea por 80 votos a 56. Dejando atrás su etapa como exfutbolista, recordada sobre todo por militar en el Levante UD, el expresidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) cambió ahí la jefatura del sindicato mayoritario por la de la patronal federativa.
Rubiales tenía entonces 40 años y tomó las riendas de la RFEF hasta el 21 de septiembre de 2020, fecha de conclusión para un mandato que ya nacía complicado. Aquello se debía a la inhabilitación definitiva que se le impuso a finales de 2017 al exmandatario Ángel María Villar, detenido en julio de ese año por su implicación en la ‘Operación Soule’.
El propio Juan Luis Larrea ejerció varios meses como presidente interino, pero perdió los comicios ante un Rubiales que se había granjeado el apoyo de las Federaciones Territoriales más importantes. Desde la cúpula de la AFE, con actitudes ahora criticadas por su excompañera de trabajo Tamara Ramos, Rubiales fraguó el salto a la RFEF y con ello abanderó varias revoluciones a nivel institucional.
Prometió una remodelación profunda del fútbol amateur, aparejada a un cambio de formato en la Copa del Rey; reclamó el mando completo de la RFEF en las competiciones del fútbol sala nacional y, por encima de todo, enfocó el esfuerzo de su gabinete hacia la profesionalización del fútbol femenino para mejorar el impacto económico y deportivo por igual.
Sin embargo, esos pilares de legislatura han acabado por tambalearse y parece que, salvo enorme sorpresa, le costarán el puesto este mismo viernes debido a un cúmulo reiterado de mala praxis. Por un lado están las medidas legales interpuestas por la RFEF contra Tamara Ramos, después de que ésta acusase a Rubiales de perpetrarle “humillaciones” cuando ambos coincidieron trabajando en la AFE.
Proliferación de críticas en tiempo récord
Estas afirmaciones de la actual gerente del sindicato Futbolistas ON, descritas como “gravísimas y falsas” por parte de la RFEF, se han unido a testimonios similares a lo largo de esta semana. Beatriz Álvarez, presidenta de la Liga F, ha tildado de “grosera y machista” la actitud de Rubiales hacia ella en algunas reuniones de trabajo.
En este sentido, se han producido en cascada los reproches al aún presidente de las RFEF por parte de máximos mandatarios del ámbito cultural, deportivo y especialmente político. El mismísimo Pedro Sánchez afeó las disculpas de Rubiales en su vídeo, solo 24 horas antes de que el presidente del Gobierno recibiera a las integrantes de la selección femenina que el pasado 20 de agosto conquistó el Mundial.
La vicepresidente segunda, Yolanda Díaz, y la ministra de Igualdad, Irene Montero, han sido las voces femeninas más discordantes en el seno de un Gobierno todavía en funciones. Pero tampoco han faltado críticas de Isabel Rodríguez, ministra de Política Territorial y portavoz gubernamental; de María Jesús Montero, ministra de Hacienda; de Pilar Alegría, portavoz del PSOE, ni de Cuca Gamarra, secretaria general del PP.
Mientras tanto el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, ha instado a que durante la Asamblea Extraordinaria haya “un gesto claro e inequívoco de rechazo” a Rubiales. También ha anunciado que el Consejo Superior de Deporte (CSD) llevará ante el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) la actuación de Rubiales durante la final mundialista.
Enorme expectación este viernes en Las Rozas a la espera de la dimisión de Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol. Pero no. Rubiales fue rotundo durante la Asamblea General Extraordinaria en Las Rozas (Madrid). Al final de su intervención, Rubiales recibió el aplauso de gran parte de la Asamblea puesta en pie.
“Ha llegado el momento de decir algo”, comenzó su discurso. “Me he equivocado y no era el momento de hacer ese gesto. ¿Es tan grave como para que yo me vaya? NO VOY A DIMITIR,” dijo y repitió por lo menos en tres ocasiones con rotundidad recibiendo aplausos de parte de la sala.
“Esta campaña no responde ni a la verdad ni a la justicia. Se me ha acusado de robar, de cobrar comisiones, de usar dinero federativo mal empleado… Nunca en mi vida he hecho eso y no van a encontrar nada.”