Atención a las notas geopolíticas de los bancos de inversión y de analistas económicos para tomas de posición en Oriente Medio y el mercado de futuros sobre el barril de petróleo (Brent y West Texas Intermediate).
Apuntan primero en dos direcciones:
a) Jordania estaría dispuesta a movilizar su Fuerza Aérea en una operación conjunta de Estados Unidos y Reino Unido si hay un segundo y masivo ataque de Irán contra Israel de misiles y drones.
b) Arabia Saudí habría decidido movilizar sus servicios de inteligencia y sumarlos en estos momentos a la comunidad de inteligencia de Estados Unidos.
En estos momentos hay dos opciones estratégicas, apuntan las notas de bancos de inversión.
En primer lugar, el presidente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris coordinan con el Pentágono repicar la respuesta internacional al ataque aéreo de Irán del 13 de abril. Entonces, una coalición liderada por Estados Unidos derribó la gran mayoría de los más de 300 misiles y drones disparados por Irán contra contra Israel.
En segundo lugar, existen informes de la comunidad de inteligencia sobre una acción muy diferente:
a) Estados Unidos quiere y busca activamente el fin de la guerra entre Israel y Hamás en Gaza. Pero desea que el sello de la paz sea el de Egipto y Arabía Saudí y no el de Irán.
b) A la vez Estados Unidos y sus aliados apuestan firmemente por el fin del estado de guerra y tensiones permanentes en la región –pequeño y grande Oriente Medio-. Era el sueño largamente acariciado por Jacob Rothschild (quien fue influyente financiero, político y filántropo británico). El hijo del barón Victor Rothschild y miembro de la rama británica de la familia Rothschild siempre ejercio como un apasionado partidario de causas benéficas en Israel y la cultura judía. Y su sueño fue el de la paz en un ecosistema de educación, desarrollo y bienestar entre culturas diferentes en Oriente Medio.
Estados Unidos ha enviado el mensaje a Irán por varios canales de que no haya un segundo ataque así como de que cesen las hostilidades contra Israel (Hamás, Yihad Islámica, Hezbolía, milicias hutíes y milicias proiraníes) y que se ponga fin a los ataques que ponen en peligro la navegación y el comercio internacional a través del Mar Rojo y el Canal de Suez.
Un mensaje tan firme enviado por Estados Unidos apunta al Plan B de la Casa Blanca de responder a un segundo ataque con un acción a la vez de defensa y contraataque.
Si Irán decide lanzar un segundo ataque podría encontrrse con la respuesta combinada de defensa y ataque. La Casa Blanca habría ordenado a la comunidad de inteligencia un plan paralelo de respuesta de un golpe devastador a la infraestructura estratégica de Irán, un ataque para degradar sus instalaciones nucleares y militares, paralizar su economía y amenazar incluso la supervivencia de un régimen radical que sólo busca la destrucción total de Israel.
Atención a los mensajes de Lloyd Austin
Precisamenta ha llamado poderosamente la atención la forma pública en la que el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, desveló (en lugar de ordenarlo en secreto) el envío de un submarino con misiles guiados a Oriente Medio y aceleró la llegada de un grupo de ataque de portaaviones a la región.
El USS Georgia es un submarino de propulsión nuclear armado con misiles de crucero. Estuvo operando en el mar Mediterráneo en los últimos días, según la Marina, tras haber completado recientemente un entrenamiento cerca de Italia.
Según el Pentágono, Austin ordenó que el submarino se adentrara en aguas de Oriente Medio. El movimiento de los submarinos con misiles estadounidenses rara vez se revela públicamente y los buques de propulsión nuclear operan en un secreto casi absoluto.
El anuncio del movimiento de este submarino es un claro mensaje de disuasión a Irán y sus representantes,
El anuncio de Austin se produjo en el marco de una llamada entre el secretario de Defensa y su homólogo israelí, Yoav Gallant. Ambos hablaron sobre “los esfuerzos para disuadir la agresión por parte de Irán, el Hezbolá libanés y otros grupos alineados con Irán en toda la región”, según anunció el Pantágono..
Austin también ordenó al grupo de ataque del portaaviones USS Abraham Lincoln que acelerara su tránsito hacia Oriente Medio, confirmó el Pentágono. El secretario de Defensa había ordenado al grupo de ataque Lincoln que se dirigiera a Oriente Medio el 2 de agosto,. Sus barcos hicieron escala en los puertos de Guam y las Islas Marianas del Norte en el camino, según la Marina. El grupo de ataque Lincoln está formado por el portaaviones, que opera con aviones de combate F-35C, así como junto a poderosos destructores.
El grupo de ataque del portaaviones USS Theodore Roosevelt lleva varias semanas operando en aguas de Oriente Medio, lo que le otorga a Estados Unidos una formidable presencia naval en la región.
A la vez gel rupo de preparación anfibia USS Wasp, que incluye una fuerza de miles de marines capaces de realizar operaciones especiales, ya está operando en el mar Mediterráneo.