El piloto británico de Fórmula 1 Lewis Hamilton (Mercedes) ha cargado duramente contra su equipo después de que una rotura de motor frustrase su victoria en el Gran Premio de Malasia y le obligase a abandonar, y ha afirmado que "algo o alguien" "no" quiere que gane el Mundial, además de apuntar que el título "va en una dirección", en referencia a su compañero Nico Rosberg, líder del campeonato.
"Parece que algo o alguien no quiere que yo gane, pero no me voy a dar por vencido", señaló ante los medios tras la prueba. "No hay nada que pueda hacer. El título va en una dirección y no hay nada que yo pueda hacer en este momento", añadió visiblemente enfadado.
Hamilton tuvo que abandonar a falta de 15 vueltas para el final, cuando comandaba la prueba, después de que se incendiara su motor. "Estás luchando por el título, y que sean sólo mis motores los que se rompen…", manifestó.
"Es difícil encontrar cosas positivas más allá del trabajo de los chicos -ingenieros-. Mis preguntas son para Mercedes; hay muchos motores para muchos pilotos y sólo son los míos los que fallan este año. Alguien tiene que darme una respuesta, porque esto es inaceptable", continuó.
Además, el tricampeón del mundo explicó cómo se produjo el incidente. "Todo iba bien hasta ese momento, con un gran ritmo, y en la recta ha pasado, no me lo podía creer. Voy a intentar reponerme y pensar en el próximo fin de semana", indicó.
"Los neumáticos iban bien, el coche iba sin problemas, estaba alejándome. Fue una situación un poco rara que de repente tengas un fallo de motor. De todos los coches con motor Mercedes sólo el mío ha tenido fallo", concluyó.